El portavoz del grupo popular en la Diputación, José Loaiza, ha lamentado que el cambio de responsables políticos al frente de la institución provincial haya supuesto pasar del Gobierno de los pueblos con el PP a un Gobierno, el socialista, que antepone las siglas a cualquier otra cuestión de interés provincial y no está a la altura de las circunstancias.
Loaiza, que ha hecho balance del año, marcado por los seis primeros meses del Gobierno del PSOE, ha subrayado que, a día de hoy, a Irene García se la conoce por firmar decretos para colocar a socialistas alcaldes y alcaldables derrotados en las urnas, por hacer mucho ruido y por sufrir la oposición de sus propios compañeros socialistas.
En este sentido, el dirigente popular recuerda el ridículo de Irene García al proponer la fusión de las escuelas de hostelería de Diputación y la Junta. “El PP advirtió de que era un error y que supondría poner en peligro la escuela de la institución provincial, que goza de prestigio y unos índices de inserción laboral admirables”, explica, “pero el no rotundo de Fernando López Gil y Manuel Jiménez Barrios dejó muy tocado el crédito de la institución con Irene García como presidenta, que está sola, sin respaldo institucional”.
Loaiza advierte, no obstante, de que hoy, el enemigo número uno de Irene García es ella misma. “Pidió siete millones de euros para mejora y mantenimiento de la red provincial de carreteras cuando estaba en la oposición y ahora, en el gobierno, sólo destina 700.000, diez veces menos; pedía cinco millones de euros para empleo en enero pasado y no hay ni rastro de ningún plan de empleo para 2016; y, en oposición, Irene García enarbolaba la bandera de los derechos sociales y criticaba los recortes, inexistentes por otra parte, del PP y ahora no destina ni un solo céntimo más que el PP a política social”, afirma.
Asimismo, hace referencia a la falta de organización, con la remodelación llevada a cabo en el Gobierno “desmantelando toda una delegación”, y el incumplimiento con los municipios de poner en marcha un plan extraordinario de inversiones en 2015, como sí hizo el PP en 2013 y 2014 con el Plan Reactiva.
Ante un Gobierno errático y los seis primeros meses en blanco, el dirigente popular plantea al Gobierno socialista a atender las propuestas del PP, dar marcha atrás y corregir el rumbo que, hoy, nos lleva a Diputación hacia la nada: “2016 debe ser el año del empleo, devolviendo al IEDT el liderazgo que gozó con el PP; debe ser el año de las políticas sociales, manteniendo una actitud reivindicativa ante la Junta de Andalucía, que siempre quiere eludir sus responsabilidades, recorta y quiere que la Diputación pague también la parte que le corresponde al Gobierno autonómico; y debe ser el año de las inversiones porque sin inversión pública no hay empleo y hasta el momento se desconoce cualquier otro proyecto que no esté incluido en el Profea o en los planes provinciales de obras y servicios”.
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