La mujer que fue detenida en Arrecife este martes acusada de reclutar supuestamente niñas y adolescentes y facilitarles el desplazamiento a zonas controladas por el Estado Islámico (EI) pasará previsiblemente a disposición del magistrado Santiago Pedraz a partir de este mismo jueves.
Viva Cádiz ha podido saber que esta mujer, de 44 años e identificada con las iniciales S. C. C. es natural de Cádiz, vivió en la capital gaditana (porque así consta en una notificación que le envió el Ayuntamiento gaditano en 2008) y actualmente trabajaba como camarera de piso en un hotel de Lanzarote.
Fuentes cercanas a la investigación explican que la mujer ha sido trasladada a Madrid y que la arrestada llegó a captar a un grupo de mujeres adolescente para enviarlas a Siria en favor del Estado Islámico, aunque no consiguió desplazar a ninguna a esta zonas para que se unieran al grupo yihadista.
Una vez que llegaban al país de destino, las niñas y adolescentes captadas —motivadas principalmente por una creencia religiosa “absoluta y sin fisuras”, según el Ministerio del Interior— ejecutaban principalmente actividades de apoyo doméstico y hospitalario o ejercían funciones de “policía fiscalizadora” de la Sharia (ley islámica)en el ámbito femenino. También eran explotadas sexualmente. Un grupo “muy reducido” se integraría en las filas de combatientes.
Según el diario Crónicas de Lanzarote, la mujer detenida vestía burka y muchos días era vista en compañía de un menor de cinco años. Según esta misma fuente, también ha trascendido que la detenida había tratado de conseguir hace unos tres meses que le hicieran un contrato de alquiler a su nombre para poder cobrar una ayuda que finalmente no se le concedió.
Esta operación policial es continuación de las desarrolladas en agosto y diciembre de 2014 por la Comisaría General de Información del Cuerpo Nacional de Policía en Ceuta, Melilla, Barcelona y también en Marruecos, que se saldaron con la detención de 10 personas. Entre ellas, se encontraba una menor acompañada de otra mujer, que fueron interceptadas en la ciudad autónoma de Melilla en el momento en que se disponían a abandonar España con destino Marruecos.
Con este arresto son ya más de cuarenta las personas detenidas en España en lo que va de año por presunta colaboración con el Estado Islámico, fundamentalmente por el reclutamiento y envío de combatientes a las zonas controladas por los terroristas islámicos.
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