Tres puntos de oro para el Cádiz, muy superior en juego al Granada, aunque el resultado de 1-0 mantuvo la emoción y los nervios hasta el final de un partido dramático por lo que es jugaban ambos equipos. Ahora, con el triunfo en el bolsillo, toca esperar que otros resultados acompañen. Por su parte, el Granada dice prácticamente adiós a la categoría.
El derbi andaluz no podía ser más agónico con un Cádiz a cinco puntos de la zona de permanencia midiéndose al Granada que encaraba la jornada a trece puntos de la permanencia, aunque con un partido menos disputado. Si a los amarillos sólo les valía ganar ni aún sumando los tres puntos parecía posible la salvación granadinista. Pero mientras las matemáticas no digan lo contrario hay que pelear y a eso salieron ambos equipos.
Pellegrino presentó dos novedades, ambas obligadas, en su ya habitual equipo titular del Cádiz. En ataque,
Chris Ramos fue el elegido como se esperaba para sustituir a Maxi Gómez, lesionado. Y en el centro de la defensa
Fali ocupó el lugar de Ousou, que apenas había podido entrenar después de sus partidos con la selección. En el banquillo, la gran novedad era el regreso de Roger Martí.
Enfrente un Granada que intentaría hacer valer el manido dicho de “a entrenador nuevo, victoria segura”,
estrenándose José Ramón Sandoval en el banquillo granadinista. Y se estrenaba con cinco cambios respecto al último partido de Alexander
Cacique Medina como técnico.
La lluvia, que había aguado el
Viernes Santo gaditano al impedir la salida de las cuatro cofradías previstas, tampoco ayudó a la hora de llenar el campo, algo ya complicado por la fecha y la hora. Pese a ello, el graderío se preparaba en un ambiente de hermanamiento andaluz para un duelo vital de cara al futuro inmediato de ambos equipos.
Arrancó con ímpetu el Cádiz, intentando embotellar al Granada. Una buena jugada de Chris Ramos por la derecha no finalizó con el deseado remate de Juanmi, que no alcanzó el pase atrás del gaditano. En esa misma jugada se pidió penalti por empujón de Boyé a Sobrino, pero el árbitro dejó seguir el juego.
De nuevo Chris protagonizó la siguiente acción de ataque, pero su flojo remate a centro de Javier Hernández no puso en aprietos a Batalla.
Probó suerte Juanmi con un difícil disparo. El balón quedó suelto en el área, pero con el delantero cadista de espaldas, aunque consiguió revolverse para chutar, pero sin consecuencias. Acto seguido, Robert Navarro hizo de las suyas para internarse en el área y probar de nuevo a Batalla, pero tampoco acertó en el disparo final, muy flojo.
Comenzaba a gustarse el Cádiz en ataque, hilvanando jugadas con criterio, pero se resistía el gol. Una y otra vez se generaba un acercamiento, pero la jugada terminaba sin remate o con un disparo centrado y flojo. Faltaba el último pase y, si lo había, un buen remate. Y así se llegó al tiempo de descanso con un Cádiz mejor a los puntos, pero sin goles frente a un Granada inédito en ataque y a un ritmo impropio de un equipo obligado a ganar para soñar con una casi imposible permanencia.
Cambios en busca de una reacción
Ambos entrenadores realizaron cambios para encarar la segunda parte. Por parte local, Pellegrino sorprendió dando entrada a Álex Fernández en el sitio de Kouamé, quizás por ajustar esfuerzos del internacional. En el Granada, Sandoval retiró a Gonzalo Villar y Hongla para contar Pellistri y Gumbau.
Y en el primer disparo potente llegó el gol, golazo, de Robert Navarro. Un pase de Alcaraz sobre la defensa granadinista encontró al vasco, siempre el mejor desde que se asentó como titular. Tras un control de calidad exquisita llegó el disparo, ante el que nada pudo hacer Batalla.
El Cádiz ya había hecho lo más difícil, ponerse por delante en el marcador, pero no podía fiarse de una distancia tan corta, así que no bajaría el pistón.
Los nervios apretaban a ambos equipos, uno prácticamente en Segunda con este resultado y otro, el Cádiz, con ilusiones renovadas pero sin depender de sí mismo. Había que seguir cambiando cosas en el campo para mejorar el rendimiento de los dos. Así, Sandoval realizó otro doble cambio y Pelegrino uno, aunque en su caso obligado al lesionarse Fali y entrar Ousou.
Una mala salida de Ledesma a punto estuvo de costar un disgusto, pero la jugada terminó con falta en la frontal del área cadista. Al sacarla, mucho peligro visitante. Corbeanu, que acababa de entrar obligó a Ledesma a despejar y otro remate posterior se fue a saque de esquina. Y al sacar el corner, más peligro con un balón perdió en el área que despejó Álex por la línea de fondo con el corazón en un puño de toda la afición gaditana.
Muy cansado también tras sus partidos internacionales, Robert Navarro dejó su lugar a Lucas Pires. Además, Alejo entró por Sobrino.
Chris Ramos tuvo el 2-0, pero Batalla ganó la partida. El gaditano, tan bueno rematando por alto, pierde mucho cuando lleva el balón controlado y puede pensar. Tras conducir la pelota y plantarse solo ante el portero visitante ni marcó ni cedió atrás a Juanmi, que entraba solo. Y la jugada sólo acabó con un corner.
A la salida del córner, gol de Juanmi que no subió al marcador por falta de Chris Ramos a Miguel Rubio en otra parte del área. Se resistía el 2-0 que el Cádiz merecía ya hacía muchos minutos.
Nervios y más nervios en el tramo final dado lo corto del resultado, que no reflejaba los méritos ofensivos de unos y otros. En estas, para refrescar el ataque, Pellegrino cambió a Chris Ramos por Sergi Guardiola mientras Sandoval buscaba la experiencia de Callejón.
La defensa amarilla era una muralla, pero el Granada se había despertado y apretaba en los últimos minutos del partido, que se alargaría durante seis más. Tocaba sufrir, como siempre en el estadio gaditano.
Ya en el tiempo extra, Batalla atropelló a Guardiola fuera del área, pero el árbitro, incomprensiblemente, no apreció falta. El Cádiz intentaba defender con la pelota, no encerrarse y jugar arriba pidiendo el aliento de la grada. Y lo consiguió para sumar tres puntos que sirven para meter presión a los primeros equipos que marcan la zona de permanencia. Se cumplió la misión, ahora toca esperar otros resultados.
- Ficha técnica -
1 – Cádiz CF: Cádiz: Ledesma; Iza Carcelén, Fali (Ousou, m. 66), Chust, Javi Hernández; Kouamé (Álex Fernández, m. 46), Alcaraz, Sobrino (Iván Alejo, m. 76), Robert Navarro (Lucas Pires, m. 76); Juanmi y Chris Ramos (Sergi Guardiola, m. 85).
0 – Granada CF: Granada: Batalla; Méndez, Rubio, Ignasi Miquel, Neva; Hongla (Gumbau, m. 46), Sergio Ruiz (Callejón, m. 86); Ricard (Corbeanu, m. 63), Gonzalo Villar (Pellistri, m. 46), Melendo (Puertas, m. 63); y Lucas Boyé.
- Gol: 1-0: Robert Navarro (m. 50).
- Árbitro: Cuadra Fernández (Comité Balear). Amonestó con cartulinas amarillas a Ricard (m. 30), Sergio Ruiz (m. 45), Chust (m. 69), Puertas (m. 69), Corbeanu (m. 72) e Iván Alejo (m. 91).
- Incidencias: 15.422 espectadores en el estadio Nuevo Mirandilla.