Iván Periano, propietario del chiringuito El Tirabuzón y presidente de la Asociación de Empresarios de la Costa de Cádiz (Aecca), admite que, una vez iniciadas las vacaciones escolares, “esperaba un poquito más” de clientela en los últimos días de junio, pero “llevamos quince días de Poniente” y se nota especialmente al caer la noche. La gente no sale. Y, de acuerdo a las previsiones de Horeca, la primera quincena seguirá la misma tónica, con una ocupación media del 86,95%.
El doble concierto de Alejandro Sanz los días 8 y 9 en el estadio Nueva Mirandilla marcará, no obstante, un punto de inflexión. “Lo vamos a petar”, apunta Noelia Martínez, directora del Hotel Spa Cádiz Plaza, mientras se afana en ultimar los detalles para la apertura, hoy, de la terraza del establecimiento. Desde entonces, y hasta final de mes, “la cosa estará más animada”, con un 90,47% de reservas.
Con estas cifras, se superarían los números de 2019, según la estadística facilitada ayer por Horeca. Periano ha reforzado plantilla como antes de la pandemia. Martínez, también.
Luis López, delegado en Cádiz de la Asociación de Viviendas Turísticas de Andalucía (AVVA), también es optimista, pese a que los turistas, nacionales en su mayoría, siguen esperando a última hora para confirmar el desplazamiento, tendencia iniciada tras el levantamiento de las restricciones por Covid.
Los tres coinciden, sin embargo, en que la inflación pasa factura. Los precios de los alojamientos son similares a los de 2019 ya, pero la rentabilidad es menor por el coste de la factura eléctrica y suministros. En el caso de la hostelería, la clientela también hace cuentas. “No hay la misma alegría en el gasto”.
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