El consejero de Hacienda y Financiación Europea, Juan Bravo, ha subrayado que los presupuestos de 2022 crecerán de "una manera importante" gracias a la aportación de los fondos europeos y los Next Generation que "inyectarán 4.000 millones en la economía andaluza" y ha asegurado que "será difícil oponerse" a ellos.
En una entrevista en Canal Sur, recogida por Europa Press, Bravo ha precisado que estos fondos estarán orientados a políticas de transformación digital, a la "revolución verde" y a vertebrar territorios.
El consejero ha explicado que ya ha empezado su ronda de negociación y que cuenta "con la firme voluntad de todos" para sentarse a negociar, aunque ha reconocido que "hay un socio prioritario que es Vox", que les ha permitido "tener presupuestos y estabilidad", y ha valorado también las "manifestaciones" del PSOE.
Sobre los acuerdos con Vox, el consejero ha remarcado que "convocar elecciones no está en la agenda" y ha afirmado que "no hay acuerdos que tengan tan amplio cumplimiento como los de Andalucía", asegurando que "se sigue trabajando en las cuestiones pendientes para darles cumplimiento antes de que acabe 2021".
"Vox lo que ha pedido hasta ahora es tener el cumplimiento íntegro de lo pactado, no habremos cumplido menos del 85%-90% de lo pactado", ha indicado. Ha precisado que "hay algunas cuestiones para las que el proceso administrativo nos lleva a algún retraso como los avales a los jóvenes para la adquisición de la vivienda".
Bravo ha agradecido a Podemos y PSOE que durante la negociación de los presupuestos de 2021 "no se filtrase ningún dato" y que el proceso fuera "leal". Así, ha indicado que el PSOE "dice que realmente está dispuesto a apoyar estos presupuestos" de 2022. "Nadie entendería que no se apoyen estos presupuestos, es difícil oponerse a ellos", ha precisado.
Preguntado por si sentaría a negociar los presupuestos con Bildu si fuera ministro, ha afirmado que "es una respuesta complicada" y que "se sentaría con quienes defiendan lo mejor para todos". "Aquellos que no miran por el bien de todos, es más difícil sentarnos en la misma mesa", ha matizado.
Sobre el millón de euros para el Senado para la traducción de las intervenciones, el consejero ha defendido que cree en el respeto porque "es cultura y valor". "Si estuviera mañana en el País Vasco, intentaría aprender euskera", ha asegurado, al tiempo que ha argumentado que "con el dinero público lo que hay que hacer es lo que necesitan los españoles" y ha insistido en que "es el momento de invertir en sanidad, educación y pensiones".
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