Lú, Cocina y Alma, gastronomía francesa y esencia jerezana

Publicado: 29/07/2019
Autor

Alerta Foodie

Álvaro Salinero, bajo el seudónimo de Alerta Foodie, lleva viajando para descubrir y reseñar restaurantes más de tres años

Cómete el mundo

Un pequeño rincón dedicado a compartir los secretos de la gastronomía, entre ellos las reseñas y recomendaciones de restaurantes

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Juanlu Fernandez dirige el único restaurante con Estrella Michelín de Jerez
El tiempo se hace cada vez más efímero, hace año y medio de mi primera visita a Lú, Cocina y Alma y casi todo ha cambiado. Realmente impresiona el proceso de cambio que sucede en muchos restaurantes en su primer año de vida, su búsqueda de una esencia única y propia que lo diferencia de los demás restaurantes de la región para que los gastrónomos pongan en su agenda una cita ineludible con este restaurante.

La sala es el cambio más evidente, simplemente por que es lo primero que te entra por el ojo, un espacio inspirado en la madriguera del conejo de la novela de Lewis Carroll ‘Alicia en el País de las Maravillas’ pasa a ser más discreta, sin perder personalidad, integrándose mejor, tanto con el menú como con el entorno.



Recuerdo un menú muy bueno, realmente creativo, aunque con un hilo algo difuso, de esa época solo queda su bocado inaugural, el mollete de atún de almadraba con mayonesa de kimchi, una explosión de sabor que sigue siendo emblema en esta casa. El fondo del menú actual se desarrolla en una cocina francesa a la andaluza, con una sublime lección de salsas que Juanlu y su equipo demuestran a lo largo de los pases de la comida. Sabores delicados a la par que elegantes, destellos de manos técnicamente prodigiosas.

La diferenciación es clara, desmarcado de la corriente de los restaurantes que buscan la cocina de proximidad con pocos ingredientes que enmascaren esos productos de la tierra, Lú apuesta por una cocina más elaborada, aprovechando productos de la tierra pero potenciándolos con la sabiduría de la cocina gala. Platos como su ‘guiño al pastel de cabracho’ o el ‘coquillage’ con el que se comienza son sublimes.



El otro gran paso adelante es el de su sección de repostería, que la última vez desentonaba con el grueso exhibido en el menú. En esta ocasión la adaptación al mismo fue perfecto manteniendo el nivel en sus tres pases.

 Realmente es un gusto tener una cocina andaluza tan pujante, restaurantes que cogerán el testigo de Dani que este año cierra. En el blog podréis encontrar distintas recomendaciones de los mejores restaurantes.

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