Ocho personas han sido detenidas por la Policía en Benalmádena (Málaga) acusadas de estafar 58.210 euros a un hombre de avanzada edad que, ante una situación emocional de desesperación y sin recursos económicos para sus necesidades, decidió poner fin a su vida al poco tiempo de denunciar lo ocurrido.
Las pesquisas comenzaron hace casi un año, a raíz de la denuncia del afectado, que manifestó haber sido víctima de una posible estafa, ya que había intentado acudir a retirar su pensión, como cada mes, a su entidad bancaria, donde le informaron de que la cuenta tenía un saldo inferior a 100 euros.
Los arrestados habían realizado numerosos cargos con su tarjeta por un valor global de 58.210 euros en establecimientos de ocio nocturno y alterne de Benalmádena y del núcleo San Pedro Alcántara, en Marbella, así como reintegros de efectivo en cajeros automáticos, según ha informado este miércoles la Comisaría Provincial de la Policía Nacional.
Según el perjudicado, esta situación le había dejado en condiciones económicas muy precarias, sin poder hacer frente a los gastos mensuales que acarreaba, por lo que se encontraba emocionalmente desesperado.
En el transcurso de la investigación los policías tuvieron conocimiento de que la víctima decidió poner fin a su vida sólo unos días después de denunciar lo acaecido.
Las pesquisas practicadas revelaron que, al menos unas diez personas estarían implicadas en los hechos y, tras muchos meses de investigación, se produjeron las detenciones de ocho de ellas.
Tres como presuntas autoras de la sustracción y fraude, otras cuatro empleadas de establecimientos que actuaron en connivencia con los ladrones para permitir el uso de la tarjeta y repartir las ganancias y una octava implicada también en la investigación.
Los agentes han intervenido prendas de vestir de firmas de lujo y otros efectos adquiridos de forma fraudulenta con la tarjeta bancaria sustraída.
Los responsables de la investigación no han podido constatar cómo estas personas sustrajeron tanto la tarjeta como la cartilla bancaria del interior del domicilio de la víctima.
Los arrestados, cinco hombres y tres mujeres, utilizaron la tarjeta bancaria del perjudicado sin su consentimiento.
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