José Loaiza y José Ortiz, presidente de Diputación y alcalde de Vejer respectivamente, han firmado el convenio que incorpora a la localidad jandeña al Plan de Empleo que la Diputación pone en marcha en los 44 municipios de la provincia. Este acuerdo se traducirá en una inversión de 158.794,14 euros y la contratación directa de cuatro personas, (un técnico de gestión, un agente de empleo y dos formadores) para la realización de dos acciones formativas coordinadas con el ayuntamiento, con 28 plazas para desempleados de la localidad.
Además de los beneficiarios directos de las acciones formativas, el programa permite orientación, asesoramiento y acompañamiento en materia de empleo para personas en paro, con el diseño de itinerarios personalizados para su inserción laboral. Según las estimaciones previas, serán alrededor de 250 personas las que se beneficien de estos servicios, que persiguen dotar de mejores herramientas y optimizar las posibilidades de integración laboral, consolidar iniciativas de autoempleo o impulsar nuevos yacimientos de empleo.
En el caso de Vejer hay planteadas dos acciones formativas: una sobre operaciones básica de cocina y otra de operaciones auxiliares de montaje de instalaciones electrónicas y telecomunicaciones de edificios, con 14 plazas cada una. Estos programas consisten en formación remunerada durante seis meses, con un primer trimestre teórico, y un segundo con prácticas en empresas que designa el propio consistorio vejeriego.
Este Plan, que gestiona la Diputación a través del Instituto de Empleo y Desarrollo Socioeconómico y Tecnológico (IEDT), cuenta con un presupuesto compartido por el Fondo Social Europeo y la propia Corporación. Su vigencia es hasta el 2014 y se van a destinar unos 14,6 millones de euros en toda la provincia.
Los requisitos para tener acceso al Plan son estar en situación de desempleo e inscritos como demandantes de empleo en el Servicio Andaluz de Empleo. Se favorecerá la participación de mujeres, personas jóvenes menores de 30 años, mayores de 45 y aquellas que tengan la consideración de desempleadas de larga duración. A su vez se tratará de favorecer la integración de personas afectadas por una minusvalía física, psíquica o sensorial; sometidas a maltrato físico o psíquico; en proceso de rehabilitación o reinserción social; pertenecientes a etnias desfavorecidas o minoritarias; inmigrantes y jóvenes que no han superado la enseñanza obligatoria
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