La calle Camino de las Nieves, donde habita un considerable núcleo poblacional, permaneció a oscuras desde la madrugada del domingo hasta las nueve de la noche del mismo día debido al acto vandálico contra un cuadro eléctrico situado en la calle Algar. Un desaprensivo o varios tuvieron la osadía de manipular este sistema que es de titularidad municipal arrojando sobre el cableado el contenido de una lata de refresco, lo cual le podría haber ocasionado al infractor una muerte por electrocución. La consecuencia fue que dejó toda la calle Camino de las Nieves sin luz, con lo que ello podría haber provocado, incluso un accidente de circulación.
El alcalde de Arcos, Isidoro Gambín, se ha referido a este suceso, en primer lugar para condenarlo y anunciar que no quedará impune, pues alguien, según ha explicado, “acabará pagando”. En este sentido, ha anunciado su deseo de reforzar la vigilancia y el control sobre todos los fines de semana, que es cuando se viene produciendo la mayoría de estos actos vandálicos.
Posteriormente, el delegado municipal de Urbanismo, Manuel Garrucho, también ha lamentado estos actos, entre otros motivos porque en el caso del cuadro eléctrico manipulado, podría haber muerto un vecino de Arcos, y, después, porque al Ayuntamiento le ha costado reparar el sistema en torno a 1.000 euros que finalmente acaban saliendo del bolsillo de los arcenses.
Nada más tener constancia de la avería provocada por el acto vandálico, el delegado dio órdenes de la rápida reparación del cuadro eléctrico, a la espera de que no se produzcan más actos de esta naturaleza.
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