El pasado fin de semana se disputaba en la localidad de Villanueva del Rosario (Málaga), el Campeonato de Andalucía de clubes de competición al que asisten primero y segundo clasificado de la zona occidental -Sevilla F.C. y Real Betis-, y los dos primeros clasificados de la zona oriental -Málaga C.F. y C.D. 26 de Febrero-, para proclamar al campeón andaluz 2016.
La primera jornada tuvo lugar el sábado a las 17.30 horas con el partido de apertura que enfrentaba al Sevilla F.C. -donde milita el arcense Enrique Ríos como capitán- y al C.D. 26 de Febrero y en el que el joven arcense tuvo un papel muy destacado abriendo el marcador con una vaselina desde el borde del área ajustándola de tal manera que entró por la escuadra, en la que el portero solo pudo observar cómo el balón acariciaba las redes. El equipo malagueño, férreo y de mucho contacto, se lo puso complicado a los sevillistas, pero los de Nervión pudieron marcar la pauta y el ritmo del partido, venciendo por tres goles a dos.
El siguiente partido entre el Real Betis y el Málaga C.F. se decidió en la tanda de penaltis, siendo un tiempo para cada equipo y en el que el Betis dispuso de suficientes ocasiones en la primera parte que no materializó. En la segunda mitad fue perdiendo gas y el Málaga, haciendo alarde de su filosofía de no perder los nervios y tocar pacientemente, logró el empate a dos, decidiendo los 11 m en favor de los de Heliópolis (5-4 en los penaltis).
El domingo a las once se enfrentaban en la gran final el Sevilla F.C. y el Real Betis, la final esperada por ambos equipos. El Sevilla volvió a dar una lección de estrategia y oficio, poniendo al Betis contra las cuerdas desde el comienzo del partido, presionando en todas las líneas y forzando al contrario a realizar desplazamientos en largos donde el Sevilla las ganaba todas por arriba por medio del arcense Enrique Ríos y de su compañero Willy, machacando al rival una y otra vez. Fruto de esta táctica llegó el 1-0 para el Sevilla logrado por Lara. En la segunda parte, el Betis salió con la lección aprendida y trató de contrarrestar el juego sevillista y sus desmarques de ruptura aguantando el marcador hasta que un fallo de los blancos dio la oportunidad de empatar el partido al Betis en el minuto 22 de la segunda parte. El equipo verdiblanco tomó oxígeno y empezó a creer, yéndose a por el partido.
El Sevilla se vio obligado a mover piezas porque perdió al mediapunta en un choque fortuito con su portero, pasando Enrique Ríos a esa línea junto al goleador Lara para presionar a la zaga del Betis.
El oficio y la dedicación del Sevilla propiciaron que Willy marcase un gol espléndido de volea desde fuera del área, poniendo el 2-1 para el Sevilla. Con la tranquilidad en el marcador llegaron el desparpajo y la magia de Lara, que firmó un hat-trick dejando el marcador en un rotundo 5-1 para el Sevilla.
La próxima semana, el Sevilla F.C. de Enrique Ríos espera en las semifinales de la Copa Coca Cola (Copa del Rey) al Atlético de Madrid y al Valencia C.F.