El alcalde de Arcos, José Luis Núñez (PP) confía en que 2013 sea un año mejor para sus ciudadanos partiendo de las expectativas económicas que manejan los expertos, pero también confía en que algunos de los proyectos que comenzaron a gestarse en 2012 vean la luz, como por ejemplo el complejo turístico promovido por una conocida firma internacional.
—Mirando a 2012, ¿cuál es su reflexión hacia un año de aciertos y errores, tal vez, propios del contexto iniciático en que se ha movido la gestión?
—Como ser humano nos equivocamos, pero rectificar es de sabios. 2012 nos ha servido de gran aprendizaje. Es cierto que el panorama del Ayuntamiento es totalmente distinto al de mi etapa como delegado. Campear la adversidad ha sido nuestro día a día, pues nos encontramos un ayuntamiento prácticamente en quiebra. 2012 ha sido un año para sentar bases, corregir algunas cosas y prepararnos para 2013, donde empezaremos a ver algunos frutos al trabajo desarrollado. La situación municipal no nos ha permitido ni tomarnos unos días libres.
—¿Será 2013 un año más desahogado en lo económico?
—Espero que sí, aunque venimos de muchos problemas y muchas cargas, más de 45 millones de deuda, y siguen viniendo peticiones de devolución de subvenciones que no se justificaron. Las obras no se hacían y estamos pendientes de reintegrar esos dineros que se nos concedieron. Quiero agradecer el trabajo del área económica a este respecto. Habrá acuerdos como el llevado a cabo con el Servicio provincial de Recaudación que nos reportará más ingresos, gracias también al aumento del padrón de viviendas, etc. También las leyes que impulsa el Gobierno de Rajoy mejorarán los ingresos del Ayuntamiento, como además lo hará la Junta de Andalucía, sin olvidar el alivio importante que supondrá el canon del agua. Otros proyectos verán la luz este año con lo que ello supondrá...
—Sí, pero el peso de la deuda es aún un fantasma...
—La deuda sigue ahí, aunque hayamos pagado otros 16 millones de euros que se han inyectado a la economía local y a familias de empresarios que llevaban años sin cobrar y abocadas al cierre de sus negocios. Tenemos que seguir tomando medidas para reducir la carga financiera, hacer más viable el Ayuntamiento, negociando y comprando mejor, mirando más por los impuestos del ciudadano... y que sos impuestos que se pagan con tanto sacrificio tengan un reflejo en la calle. Al mismo tiempo, tenemos que seguir prestando los servicios mínimos.
—¿Y se garantizan esos servicios mínimos?
—Por supuesto que sí. Los ayuntamientos nos metemos en competencias que no son las nuestras. Eso se podía hacer en otros tiempos de bonanza, donde se creaban nuevos servicios y nuevos compromisos con la sociedad; pero hay servicios que son de otras administraciones, y eso hay que corregirlo. Es preciso evitar duplicidades, y creo que será saludable la nueva propuesta del Gobierno central que redundará en los ayuntamientos. Por ejemplo, los ayuntamientos no tienen competencias sobre los colegios, y aquí corremos con la nómina de los conserjes, de las limpiadoras, etc.
—¿Se pondrán en marcha algunos de los proyectos planteados en el terreno turístico?
—Ya digo que 2013 será un año mejor en lo económico para el Ayuntamiento. Pero las circunstancias cambiarán. En los primeros días de este mes, Promovalor y Royal Iberia, que son las dos sociedades que promueven el proyecto de El Postuero, visitarán la ciudad para confirmar que van adelante, firmar el convenio e iniciar los trámites necesarios. Por tanto, tenemos ya una buena noticia. Ha sido estos días de fiesta donde se ha cerrado la visita. El consejo de administración de esta empresa ha dado el visto bueno. Se trata del primer proyecto de la empresa en España, ya que actualmente realiza otros en Portugal, Sudáfrica y Brasil . Si se firma el acuerdo urbanístico, nos ponemos a trabajar ya. Hay otros proyectos agroalimentarios, tres en concreto. Uno de ellos con Iberdrola para utilizar el CO2 de la central para los cultivos bajo abrigo. Un productor holandés y otro almeriense están muy interesados en este proyecto cuya virtud es que los productos agrícolas salen al mercado antes que los productos cultivados tradicionalmente. También próximamente tendremos reuniones con Iberdrola para ver cómo marcha la planta de microalgas y otras iniciativas. Además, existe otro proyecto de oleoturismo en la finca Marcharaví que lógicamente es responsabilidad de un empresario privado. De todos estos proyectos espero sobre todo que creen empleo. En este sentido, 2013 será un año que nos deparará muchas alegrías. También estos días Arcos se ha integrado en un plan piloto sobre energías renovables y eficientes que nos ha permitido ingresar casi 500.000 euros, con lo que podremos actuar en la iluminación de las calles sustituyendo las luminarias con un ahorro del 40 por ciento, además de poder iluminar la peña de la ciudad. También hemos conseguido un plan especial de empleo de Diputación que ayudará a muchas familias. Se empieza a ver el resultado del trabajo realizado...
—¿Habrá segunda edición del Plan de Inserción Laboral de Arcos, el famoso PILA?
—Sí. Este plan ha sido una apuesta por amortiguar la situación de paro de los arcenses. Con la caída de la construcción y de la agricultura, la economía se paralizó y había que acordarse se mucha gente. Nos ha permitido atender a muchas familias al tiempo que hemos mejorado determinadas infraestructuras. Seguiremos echando una mano a quienes lo necesitan y seguiremos mejorando nuestra ciudad.
—Pero si nos fijamos en los datos del desempleo, el panorama no es muy halagüeño que digamos, ¿qué diría a los parados de su ciudad?
—Yo no recuerdo situación tan dramática, pero cuando nuestros padres vivían también había dificultades, pero vivían de otra manera. Eran felices con menos necesidades. Ahora raro es el que no tiene que pagar una hipoteca, la letra del coche... Las circunstancias nos han cogido con el paso cambiado. Hemos estado muy bien y nos hemos metido en inversiones no necesarias. Pero yo espero que las medidas que se toman desde el Gobierno sean las necesarias si queremos salir de la crisis, por muy impopulares que parezcan. La UE empieza a valorar positivamente esas medidas, y este año nos pondremos en la senda de la recuperación, lo cual nos hace pensar en un panorama más esperanzador, aunque, insisto, sin vivir al mismo nivel que hasta ahora. Los problemas de España no se solucionan con manifestaciones y pancartas, sino poniendo los mimbres para una España mejor, y siendo coherentes con lo que tenemos. Seguiremos trabajando y tomando medidas que, aunque impopulares, son valientes, y así lo reconocen los ciudadanos. El PSOE no ha podido lograr que el español recupere en él la confianza, y si es el PSOE de Cádiz, ahí está, roto internamente. Los ciudadanos saben que las medidas son justas y necesarias.
—Ya en el Pleno vislumbraba la importancia del canon de Aqualia para “tapar agujeros” en el Ayuntamiento. ¿Cómo empleará esos, por ahora, 2.5 millones de euros, que también es una inquietud de la oposición?
—El PSOE nos ha pedido un plan de empleo, cuando sabe que no tenemos las competencias. Que se lo pidan a Griñán en la Junta, que es la que tiene las competencias. Como dije en el Pleno, es curioso que le pidan un plan de empleo a Rajoy y al alcalde de Arcos... El Ayuntamiento no es un generador de empleo. Hay que animar a los empresarios y poner medidas que faciliten la contratación. Dentro de poco veremos los frutos de la reforma laboral. El Ayuntamiento, desde luego, no tiene capacidad para terminar con el problema del paro en Arcos, aunque pueda ayudar con diez o quince días de trabajo a algún desempleado, pero poco más. Respecto al canon del agua, es cierto, como dije en el Pleno, que hay que tapar muchos boquetes. Ese dinero no nos solucionará los problemas, pero habrá que apostar por inversiones y seguir pagando deudas, así como favorecer que algunas personas que están en paro trabajen. Para tranquilidad de todos, en los presupuestos se verá reflejado ese dinero.
—¿Qué papel ha jugado la oposición en 2012 desde su punto de vista?
—El PSOE está nervioso y ha sufrido un gran revés en las últimas elecciones municipales. Estamos viviendo episodios a nivel provincial con un conflicto interno. Los socialistas se reprochan cosas, como los barones piden a Rubalcaba la regeneración y la alternancia en la dirección... El señor Zapatero ha sido el peor gobernante que ha tenido España. Eso lo ha pagado ante la sociedad por mucha renovación que se nos quiera presentar. El PSOE pone trabajas y zancadillas, y lanza cortinas de humo para tapar su realidad. No estamos para enfrentamientos, sino para trabajar codo con codo. Cuando lleguen las municipales se buscarán otros objetivos, pero ahora es tiempo para trabajar. No es tiempo para discutir, formar ruido y montar alborotos.
—¿Qué tal la experiencia de compartir el gobierno de Arcos con Ai-Pro?
—Llevamos ya dieciocho meses juntos porque así lo quisieron los ciudadanos para sacar adelante este Ayuntamiento. Tenemos una mayoría sólida que nos permite sacar adelante los proyectos, como tenemos claro que Arcos necesitaba gente trabajadora y que buscara soluciones a los problemas. Aquí no somos del PP o de Ai-Pro, sino un gobierno que rema en la misma dirección. Antes hubo una experiencia de pacto que fue muy efímera (Por el acuerdo PSOE -IU en 2003). Llevamos dieciocho meses juntos trabajando por los arcenses, y cuando hay diferencias se razonan. Nuestro objetivo es Arcos, Arcos y Arcos. Ya llegará el momento de hablar de siglas y programas.
—¿Qué espera, en conclusión, del nuevo año que acaba de empezar?
—Que las cosas cambien. Habrá proyectos que saldrán adelante y veo interés de varias empresas por instalarse en Arcos, y porque España empieza una recuperación que, aunque lenta, es esperanzadora. Quiero ser optimista. Todos los factores e indicios apuntan a eso. El pesimismo, por otro lado, no nos conducirá a ningún lado.