Arcos vivió una nueva jornada de fe con motivo del Corpus Christi. La procesión de Jesús Sacramentado partiría un año más de la Basílica Menor de Santa María de la Asunción con las tradicionales muestras de apoyo de las hermandades locales, cuyo hermanos mayores o representantes formaron parte del cortejo junto a las primeras autoridades municipales y un importante número de niños y niñas que este año han realizado su primera comunión.
Tras la emotiva misa en el templo, la procesión mostró los pasos de la Custodia, Nuestra Señora del Socorro, San Miguel Arcángel (patrón de Arcos) y el Lignum Crucis, que fueron portados por hermanos de las distintas cofradías locales para recorrer el casco antiguo. La Iglesia quedó representada por el sacerdote párroco de Santa María, Manuel Jesús Ortiz, y la hermandad de La Sacramental por su hermano mayor, Luis Reyes, en lo que constituye una procesión que puso colofón al triduo celebrado en Santa María con motivo del Corpus.
Algunos tramos del recorrido mostraron un pavimento alfombrado con romero como antaño, así como las fachadas lucieron mantillas y otros adornos, e incluso se instalaron pequeños altares como culto a Cristo. Las temperaturas del día ayudaron al lucimiento de la procesión, sin el calor agobiante de otros años.
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