Con unos presupuestos para 2022, sin prórroga de los actuales, para no generar más dificultades a las empresas
El presidente de la patronal andaluza CEA, Javier González de Lara, ha apostado este viernes por la estabilidad presupuestaria y política en Andalucía con unos presupuestos para 2022, sin prórroga de los actuales, para no generar más dificultades a las empresas.
En una entrevista en Canal Sur radio, el presidente de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA) ha explicado que estamos en un "punto importante de inflexión" y, por eso, ha reclamado estabilidad social y política porque genera confianza en la inversión.
"Los empresarios no estamos en la contienda política", ha afirmado el dirigente empresarial, quien ha sostenido que sería "muy difícil entender que no haya un gobierno estable y que no haya presupuestos", por lo que ha deseado que "ojalá las fuerzas políticas andaluzas se pongan de acuerdo" para sacar adelante las cuentas de 2022, en las que hay que incluir los fondos europeos Next Generation.
En este sentido, ha advertido de que el "runrún político y mediático permanente sobre un adelanto electoral genera distracción" y no favorece la inversión y ha incidido en que "en un momento como éste de recuperación hablar de ello no genera confianza para los inversores".
En relación al debate sobre la subida del Salario Mínimo Interprofesional, el presidente de la patronal andaluza ha dicho que no es el momento de subir los costes a las empresas, a pesar de los "síntomas de recuperación", y ha insistido en que afectaría al empleo en muchas pymes porque supondría subida salarial equivalente a 900 euros al año, aunque "19 euros al mes parezca poco".
"No es el momento -de aplicar la subida del SMI-, aunque estamos abiertos a hablar", ha apostillado.
Sobre los 1.100 millones de ayudas a las empresas andaluzas del gobierno central para amortiguar las pérdidas por la pandemia, González de Lara ha avisado de que se pueden perder muchos fondos si no se corrige el decreto regulador porque es "muy restrictivo y con desmedidas exigencias" y, por tanto, pocas empresas las pueden solicitar.
Con ese "afán regulador se penaliza a quien ha pagado sus facturas", ha manifestado González de Lara, quien ha criticado el exceso de burocracia que impedirán a muchas empresas beneficiarse de las ayudas.