Llámenla como quieran. Esta pasada noche de San Juan se pudo observar uno de los fenómenos astronómicos más esperados: la superluna de fresa, legendariamente canadiense, o superluna rosa, en versión europea. Su singularidad y espectacularidad no admite ningún género de dudas, aunque la comunidad científica la considere una luna llena sin más. A simple vista, a mí, les prometo que no me influyó la crisis de estabilidad surgida en el ejecutivo consistorial jaenero, siempre me pareció naranja, naranja de la China, tan singular como efímera. Mero reflejo del sol (que más calienta). Luna caliente, la que anuncia el estío, sin más. ¿Por qué la luna brilla si no tiene luz propia? La salida por peteneras de María Cantos, y sus circunstancias, del equipo de Gobierno y de donde hiciera falta, el mismo día en que el Consejo de Ministros aprobaba el indulto a los presos del procés, no debiera de sorprender a nadie, y menos aún a quienes gobernaban hasta ahora con ella o a aquellos otros que pretendieron hacerlo en junio de 2019, tras el naufragio, como el que se aferra a lo primero a mano que flote. Dejen de hacerse, pues, los sorprendiditos, ofendiditos, indignaditos, y céntrense en lo que importa: el proyecto de futuro que en la actualidad podía ofrecer ‘Cs’ a María Cantos y a tantos otros recién llegados a una aventura política que iba como un tiro hasta hace dos años, justo antes de los pasos en falso, la foto de Colón, el batacazo de Albert Rivera, su súbita desaparición de escena y los infructuosos intentos de levantar el muerto. La experiencia de marca de cara a retener a un consumidor/elector que ya estaba más p’allá que p’acá.

El panorama de ‘Cs’ devino en la huida hacia el PP del único referente interno imprescindible para entender la permanencia de María Cantos y su gente en la formación liberal durante el cambiante pasado reciente, Fran Hervías.  A partir de ese punto de inflexión, apenas cabía ponerse de medio lado y recomponer la hoja de ruta particular de los ex dirigentes vecinales que registraron  en su día la marca ‘Jaeneros’ para resistir financieramente hasta 2023. La estrategia, en primera instancia, pasaba por abandonar el sector crítico que Hervías creo para contrapesar a Juan Marín. Dejar de hacer causa común, ipso facto, con Mónica Moreno y Rocío Ruiz. Cantos viró hacia Marín, reclamando al coordinador provincial, Miguel Moreno, un par de contraprestaciones: en lo orgánico, el área de Organización para su mano derecha, Luis Pulido; y en lo institucional, reemplazar a María Orozco por Bruno García, gerente de ‘Comercio Jaén’. ¿Respuesta? La negativa en rotundo a condescender y, menos aún, a romper el pacto (Miguel Moreno, que solo contó en el grupo municipal capitalino, desde el primer día, con María Orozco, encomendó la tarea reorganizativa provincial al alcalaíno Ángel Montoro), avalada in situ por el responsable nacional de Organización, Borja González. El pretexto público para la ruptura, un potaje en toda regla, se condimentó con el indulto, la ITI, el Colce, las cortapisas de Carlos Alberca a Miguel Castro, y el largo etcétera de agravios en una relación viciada desde el comienzo. ¿O es que, acaso, no se acuerdan de lo que Paco Díaz confesaba a sus compañeros en las horas previas a la consumación del pacto con los socialistas? El PSOE de Julio Millán, por su parte, ha propalado un relato de premeditación y alevosía sobre una moción de censura a todas luces inverosímil. El candidato a la alcaldía sería Javier Carazo, el maestro Yoda/“Siente la fuerza” en que Cuqui Márquez quiso apoyar su compleja reelección. María Orozco habría cedido su acta a Bruno García. Y el más difícil todavía: Salud Anguita, superada su baja psicológica en julio y salvadas las diferencias irreconciliables con las alturas de Vox, se sumaría junto a su segundo de a bordo a una moción de censura de la que se pudo elucubrar, difícilmente conjeturar y en ningún caso programar nada en serio. Así, a partir de los 11 del PSOE y María Orozco se forja la resistencia, a dos años vista, descartando cualquier acuerdo estable con los 2 de Adelante. El lunes que viene, 5 de julio, Inés Arrimadas y Juan Marín llevarán a cabo, en Baeza, el acto provincial de relanzamiento del proyecto de ‘Cs’.  Un eclipse lunar penumbral ocurrió precisamente el 5 de julio de 2020 en la primera luna llena de julio, denominada luna de trueno, la fase lunar recomendada para llevar a cabo las tareas de eliminación de aquellas plantas que no deseamos en nuestro huerto. Para los apologistas de María, cantos de sirena, cantos rodados, la María que promovió la candidatura Colce y alentó, junto a ‘Jaén Merece Más’, la revuelta subsiguiente, no obstante, aguarda la gloria (o no) de constituirse en ese brazo político, a lo ‘Teruel Existe’, que tanto anhela un sector preeminente de las plataformas de la Jaén despoblada.