Este país siempre ha sido especial en todo, incluso en lo que respecta al deporte y, en los últimos años, vivimos en una constante politización de todo lo que supone la vida de los ciudadanos. Todo es susceptible de polémica y de utilización partidista.
En esta ocasión le ha tocado a nuestra Selección de Fútbol a escasos días de la competición de la Eurocopa y tras el positivo de dos jugadores en coronavirus. Y sobre esto también ha habido polémica importante por parte de determinados políticos que asimilan el dinero que ganan nuestros futbolistas con determinados privilegios desde su punto de vista.
Desde mi punto de vista el debate no está en la edad de los jugadores y si hay ciertos privilegios. Para mí, lo grave es el grado de vacunación que hemos tenido en la Unión Europea ante determinados incumplimientos contractuales y de calendario de vacunación en los países de nuestro entorno. Si se hubieran cumplido quizás buena parte de los jugadores estarían ya vacunados, no habría que hacer una excepción en cuanto a la edad de estos.
Otros países como los Estados Unidos o Israel no hubieran tenido esta polémica en la vida. Allí incluso ya se va sin mascarilla por la eficacia en la gestión de vacunas que se ha realizado.
Es cierto que estamos en buen ritmo de vacunación, sobre todo desde el mes de mayo, pero, comparado con estos otros países, sí que la diferencia es notable.
Aprovecho todo esto para hacer especial hincapié en la necesidad de abordar los temas con total serenidad, sin crispación política. España necesita un debate centrado y moderado, sin aspavientos, sin confrontación política por temas de interés general. Debemos centrar todos los esfuerzos, desde todos los ámbitos, por la salida de esta importante crisis económica, social y sanitaria en la que estamos inmersos.
No soy optimista.
Desde hace años perdí la esperanza en que se tendría responsabilidad por parte de todos y que habría interés común en las cuestiones de estado. Se vive en la política en el cortoplacismo en el regate corto basado en las encuestas electorales que en muchos casos aparecen maquiilladas.
Esa es la realidad que vivimos y solo cabe desear suerte a nuestra Selección para que paren los casos positivos en la concentración y para que realicen un buen campeonato. Se me antoja difícil cuando el foco está en cuestiones que trascienden a lo meramente deportivo y que complican la serenidad y tranquilidad que todo equipo debe tener.
Esto es España. Así llevamos siglos y no aprendemos de los errores y del devenir de nuestra historia.
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