El portazo de Vox al Gobierno andaluz ha despertado los cantos de sirena de un posible adelanto electoral, al quedarse PP y Ciudadanos gobernando en minoría. El presidente andaluz, Juanma Moreno, ha querido ser tajante: “Queda un año y medio de legislatura. Tiempo habrá para coger bocinas, los micrófonos y los carteles electorales y ya decidirán los andaluces”.
Durante la sesión de control al presidente, Moreno ha apelado a la “unidad” de las cinco fuerzas parlamentarias para “no mirar por los intereses partidistas y sí hacerlo por los andaluces”. El dirigente andaluz ha insistido en que “hay dos problemas en Andalucía: vacunar y crear empleo. Hay que resolver los problemas de la gente”.
Sin embargo, Vox mantiene su pulso al Gobierno andaluz. El miércoles le retiró su apoyo a la reforma de Ley de Salud Pública y se abstuvo en la votación sobre el debate a la totalidad de la Ley de Impulso para la Sostenibilidad del Territorio de Andalucía (Lista). El portavoz de Vox en el Parlamento, Manuel Gavira, ha pedido a PP y Cs que “cumpla con lo pactado”, ha defendido que su partido es “leal y responsable” y le ha señalado al Gobierno andaluz “otros socios” parlamentarios para seguir en San Telmo.
Moreno, por su parte, replicó a Vox acusándole de “alinearse” con Podemos para “erosionar al Gobierno”.
También, el portavoz del grupo parlamentario del PSOE, José Fiscal, ha criticado que el Gobierno de Andalucía “está débil y quemado al perder fuerza sin el apoyo de la extrema derecha”.
Por último, desde Adelante Andalucía han lamentado la “condescendencia” de Juanma Moreno “cuando no tiene apoyos para gobernar”.