Emprender es empezar de cero. Es buscar un presente y un futuro. Es fijar metas. Es idear, innovar o sorprender al público. Es intentar lograr el éxito. Emprender es tener iniciativa. Y el emprendimiento, ahora más que nunca, se ha vuelto una alternativa a la situación laboral actual.
Y es que en España -ya antes de la pandemia-, emprendedores, startups o pymes ya eran parte de nuestro vocabulario. De hecho, un estudio de South Summit en 2020 apunta que el 63% de los emprendedores de nuestro país eran reincidentes. Es decir, habían creado dos o más empresas.
De este modo, uno no emprende solo por necesidad, sino que muchos lo hacen por vocación o por ver una oportunidad de mercado. Si a una visión global y proactividad, le sumas ingenio, ganas, creatividad y, por supuesto, capacitación; la fusión puede ser muy enriquecedora (en todos los sentidos).
El emprendizaje también necesita formación
Últimamente, se oye mucho esta palabra: “emprendizaje”. Y sí, se trata de un sinónimo de “emprendimiento”. Pero como todo sinónimo tiene sus matices… y “emprendizaje” comprende tanto al “emprendimiento” como al “aprendizaje”. Algo que, a juicio de todos, se vuelve imprescindible.
Para llevar un negocio de forma exitosa, ya no solo es necesario disponer de ilusión y perseverancia; hay que estar preparado. Y la formación siempre es necesaria.
Por consiguiente, entre la gran variedad de cursos de administración de empresas que dispone la escuela de negocios especializada en formación online, Euroinnova Formación, su máster en finanzas es una de las formaciones online más demandadas.
En una sociedad como la nuestra, la economía siempre juega un papel fundamental. Ya no solo en lo que respecta al ámbito pecuniario. De ahí que unos estudios de este tipo estén muy solicitados.
Encontrar tu hueco en el mercado
“El espíritu empresarial es, sobre todo, una actitud en la que se refleja la motivación y la capacidad del individuo, independiente o dentro de una organización, a la hora de identificar una oportunidad y luchar por ella para producir nuevo valor o éxito económico”; así define el Libro Verde. El espíritu empresarial en Europa, presentado por la Comisión de las Comunidades Europeas, al espíritu empresarial europeo.
Y como se puede apreciar es un “espíritu” del todo emprendedor. Y es que encontrar un nicho de mercado que dé beneficio no es tarea sencilla. A veces, incluso, hay que asumir riesgos.
No obstante, una educación emprendedora aporta una visión innovadora en el futuro emprendedor. Y, volviendo a la actualidad, innovar es sinónimo de sostenibilidad y nuevas tecnologías.
Innovar y emprender
Un pensamiento más verde impregna todo. ¡Y no es para menos! La importancia del cuidado del medio ambiente se hace cada vez más visible en las empresas o marcas: un packaging reciclable, tejidos de ropa ecológicos o el uso de materiales reciclados para crear nuevos objetos. En definitiva, las 3 erres están muy presentes.
Pero, sin duda, en un país como el nuestro, donde tenemos tal cantidad de luz solar; innovar tiene que hacer referencia al uso de las energías renovables. Energías limpias, sostenibles que, poco a poco, van dejando atrás a las fósiles y contaminantes.
Asimismo, la digitalización ha supuesto un cambio tremendo en todos los aspectos. Ya no solo en el mundo laboral con el teletrabajo.
Compras por Internet, reservas de restaurantes o clases online forman parte del día a día. Lo online ha llegado para quedarse. Y el emprendimiento, en este sector digital, es más necesario que nunca.
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