Asociaciones del sector del taxi han reclamado a la Junta de Andalucía que les incluya en las listas de vacunación de miembros de servicios considerados esenciales como los empleados de farmacias o el personal docente.
En un carta conjunta remitida al consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre, la Unión de Asociaciones de Taxistas Andaluces (UATA) y la Federación Andaluza Élite Taxi (FAET) aseguran sentirse “olvidados” para la administración.
Coinciden al demandar al consejero su “pronta” incorporación a los grupos de vacunación prioritaria, no solo por el bien de los trabajadores de este colectivo, sino para evitar poner en jaque la salud de las personas a las que trasladan a diario, muchas de ellas de alto riesgo.
Los empleados de este sector, calificado desde el principio como un servicio público esencial, sufren “en primera persona” los efectos de la pandemia debido a que trabajan con un grado de exposición al virus “extremadamente alto” y en las condiciones “más propicias” para el contagio, subraya la misiva.
El taxi traslada a diario tanto a particulares que van a realizar sus gestiones diarias como a pacientes y sanitarios a los hospitales o a mayores y personal a residencias de la tercera edad, con el consiguiente riesgo que esto supone para trabajadores y clientes, insisten en el documento desde UATA y FAET.
Se trata de un colectivo en activo que “siempre” ha estado ahí, incluso en el periodo de “confinamiento más extremo” -apunta la solicitud enviada a Salud y Familias- y que realiza una función “esencial para la sociedad”, pero “invisible” para las administraciones públicas.
Ambas agrupaciones sectoriales se muestran esperanzadas en que se les tenga en cuenta y esperan que esta reivindicación no caiga en "saco roto", concluye el documento.
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