Aunque inicialmente parecía que el hombre se había quemado a lo bonzo en plena calle, la investigación policial determinó que no fue así, sino que J.V.C., de 47 años, se quemó accidentalmente al encender el cigarrillo. El alcohol de romero es un remedio tradicional contra dolores musculares o articulares, así como por molestias causadas por corrientes de aire, frío o exposición a la humedad.
El suceso, según publica este martes el diario 'SUR', ocurrió en la noche del pasado 6 de noviembre en la Cuesta Real, en la barriada antequerana de San Juan.
La víctima, que presentaba quemaduras que afectaban casi al 80 por ciento de su cuerpo, fue llevado al Hospital Comarcal de Antequera y de allí fue trasladado al Carlos Haya, donde falleció el pasado viernes.
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