Contenido ofrecido en colaboración con la Consejería de Turismo de la Junta de Andalucía
La de 2020 va a ser una navidad diferente por razones obvias, pero diferente no es sinónimo de inexistente. Ni mucho menos. Si bien es cierto que las restricciones impuestas para frenar la propagación de la pandemia condicionan en gran medida, hay muchos planes que se pueden realizar en las ocho provincias andaluzas. Y si es que algo sobra en esta tierra son maneras de vivir estas fiestas.
El Covid-19 no va a poder con las tradiciones y costumbres de esta época y en las ocho provincias andaluzas todo está preparado para vivir la mejor navidad posible. Si bien las tradiciones son en gran medida compartidas, cada rincón de esta comunidad tiene una forma peculiar de vivirla, las une un mismo sentimiento identitario. La música, los mercadillos callejeros, el alumbrado público, los belenes, la gastronomía… hay un sinfín de planes a realizar durante las fiestas.
Navidad es luz y gastronomía
Todas las ciudades se vuelven a engalanar en forma de luz, pero destacan especialmente los alumbrados de ciudades como Sevilla o Jaén. Este año, la capital hispalense recurrió a la sorpresa para proceder al encendido, sin avisar para que no se produjeran aglomeraciones, pero con todos los incentivos intactos para animar a visitar a los comercios locales de forma segura, más que nunca en estos momentos en los que tanto apoyo necesitan, al igual que nuestros bares y restaurantes donde brindar, con total seguridad, por otra navidad más.
Otra tradición que se mantiene este año es la de los mercadillos. Tan típicos de estas fechas, despachan artesanía característica de cada lugar para decorar la casa con motivos navideños y belenes. Con todas las medidas de precaución, pero este año no faltarán tampoco los belenes vivientes protagonizados por vecinos de numerosas localidades. Famosos son los onubenses de Galaroza, Beas y Corrales, Almayate (Málaga) o Arcos de la Frontera, Medina Sidonia, Espera, Ubrique o El Gastor (Cádiz), Fontanar (Jaén) y Córdoba capital. Y no es viviente, pero en Rute (Córdoba) el increíble belén realizado íntegramente con chocolate no falta esta navidad a su cita. Puedes visitarlo de manera virtual
pinchando aquí.
La gastronomía es una de las señas de identidad de la navidad andaluza. Sus sabores pueden degustarse y adquirirse en los establecimientos de nuestras localidades. Son productos de máxima calidad con los que podemos viajar por toda la geografía andaluza sin movernos de nuestra localidad tales como aceites, jamones, marisco, vinos y dulces como los de Estepa (Sevilla), Antequera (Málaga), Montoro (Córdoba) o Medina Sidonia (Cádiz). Sus alfajores, mazapanes y mantecados no tienen parangón.
Y qué decir de los vinos. Tres son las rutas fundamentales de las que disfrutar de los caldos andaluces. La del Condado de Huelva, con vinos de Castillo de Niebla, los Lugares Colombinos, Moguer y Doñana. Las rutas del vino y del brandy de Jerez es otra de las joyas gastronómicas. No sólo se pueden degustar especialidades de Jerez como el fino o el palo cortado, sino de Sanlúcar de Barrameda, Chipiona, Rota, Trebujena, El Puerto de Santa María, Chiclana o Lebrija (Sevilla). Montilla-Moriles es otra ruta de vinos típica con caldos de Aguilar de la Frontera, Córdoba, Fernán Núñez, La Rambla, Lucena, Montemayor, Montilla, Moriles y Puente Genil.
Una navidad diferente, pero igualmente un viaje para los sentidos y las experiencias. Cada rincón de Andalucía inunda nuestra ciudad y su riqueza nos permite estar presente en todos ellos.