- En estos casos la primera pregunta que se debe hacer ¿Cómo ha llevado el confinamiento?
- El confinamiento ha sido muy difícil de llevar, yo creo que para todo el mundo. Sobre todo al principio con todas las contradicciones, imprecisiones e improvisaciones que se hacían cuando nadie sabía por dónde iba a salir esto. Eso me colocaba a mí personalmente en una situación muy difícil porque nunca nadie, yo creo que ningún representante público, había imaginado jamás que le tocase liderar una pandemia internacional que se ha cobrado tantísimas vidas.
- ¿La mayor huella que le va a dejar la epidemia va a ser ese bigotón tipo defensa central de los años 80?
- Totalmente, por lo menos la huella física (entre risas). Yo creo que la huella más importante, espero que sea también compartida por muchísimas personas en el mundo, es el mensaje que nos lanza el planeta propiamente; ese mensaje de alerta de lo que está pasando y de cómo utilizamos el planeta y los recursos naturales de los que disponemos. Esto es un toque de atención muy serio. Evidentemente la deforestación, la desaparición de los espacios naturales salvajes de nuestro planeta han hecho que determinados seres vivos salvajes, que son como sabemos repositorios de virus y de infecciones, al no tener espacios naturales donde vivir se acerquen más a los humanos con lo que eso significa.
- Tampoco ha salido mucho, o por lo menos no se no se ha publicitado mucho sus salidas, como por ejemplo Almeida que todos los días ha salido en fotos por distintas esquinas de su ciudad.
- He hecho visitas a Protección Civil en tres o cuatro ocasiones, también a voluntarios que organizaban ropa y comida, a Elcano... Pero ese es un juego al que uno se suma a jugar si le gusta esa forma de hacer política, si te llevas a tu fotógrafo a los actos. A ese juego no he querido jugar en esta ocasión porque no es serio ni necesario. Me he dedicado a trabajar y gestionar los efectos de esta pandemia en la ciudad, con el agravante de que en casa tengo a dos personas de riesgo: mi pequeña Aurora que nació con un problemilla en el corazón y Teresa que está embarazada. Por tanto era importante minimizar las posibilidades de contagio. No obstante, he salido cuando he visto oportuno salir y el resto del tiempo he estado detrás de una pantalla trabajando sin hora, intentando que los efectos sanitarios y económicos tengan un impacto mínimo en la ciudad en la medida de mis competencias.
- De alguna manera, la pandemia va a marcar su segundo mandato.
- Evidentemente, yo creo que los efectos del Covid-19 van a marcar la gestión económica, política y social de la agenda de todos y cada uno de los partidos de todos los gobiernos este planeta, no solamente de Cádiz. Asistimos con mucha expectación a las decisiones que se van a tomar no solamente en el Congreso de los Diputados, sino que también estamos expectantes a las decisiones que se marquen desde ámbitos internacionales. Creo que esto va a marcar de forma muy importante la política en el corto y el medio plazo, y espero que en el largo por esa nueva normalidad a la que la que vamos a volver.
- En su caso, será en el plazo de su último mandato
- Exactamente. Se firmó así en el acuerdo del año 2015, la limitación de mandato, y evidentemente en las próximas elecciones municipales habrá otra persona al frente del proyecto político al que yo he contribuido a construir durante estos años. Las personas van y vienen y las ideas son las que permanecen, yo no creo que sea imprescindible una persona en sí sino las ideas que es capaz de liderar y los proyectos que es capaz de de hacer realidad.
Esa decisión ¿no tiene marcha atrás?
- Yo creo que no tiene marcha atrás. Anguita también estuvo de alcalde de Córdoba durante ocho años y después ni se mudó de planeta ni desapareció de la esfera pública. Yo tengo muy marcada la raíz en mi ciudad y seguiré trabajando y velando por el futuro de esta ciudad allá donde me encuentre, en la trinchera o en el frente en el que me toque combatir.
- Le digo esto porque parece que la reforma estatutaria de Podemos va a suprimir cualquier tipo delimitación. Aprovecho para hacerle una pregunta ¿sigue militando en Podemos?
- No milito en Podemos, estoy en Adelante Andalucía desde que comenzara este proyecto. Toca construir un proyecto político progresista, a la izquierda del Partido Socialista y con una voz y un acento evidentemente andaluces. Con podemos tenemos muchísimas coincidencia hemos sido, somos y seguiremos siendo compañeros en el futuro, pero creo que cada uno tiene que echar donde le toca y mi sitio ahora es Adelante Andalucía y Adelante Cádiz.
- Ha publicado fotos en redes sociales donde sale de compras en una especie de apoyo al comercio local. Una de las tareas pendientes de la reconstrucción será que cobre vigor de nuevo ese mercado local, ¿no es así?
- Evidentemente eso entra siempre en la línea política que hemos defendido desde el principio, para nosotros apoyo al comercio local de proximidad y la economía de cercanía es un elemento con el que comulgamos absolutamente. Y eso ahora pues se vuelve más necesario que nunca. En el caso del comercio, es necesario que la gente se dé cuenta y descubra que el dinero que tú inviertas en la ciudad y que y que mueves en la ciudad se queda aquí, y eso significa que genera empleo frente a este paradigma individualizado e impersonal de las multinacionales y grandes corporaciones económico-financiera.
- Desde Horeca han solicitado una ampliación de las terrazas allá donde se puede, ¿hay que tener un poco de tolerancia en estos momentos para la reanudación de la hostelería, no?
- Absolutamente, esa línea del Ayuntamiento de Cádiz, la flexibilidad y tener en cuenta que estamos en tiempos de excepcionalidad. El concejal de urbanismo, Martín Vila, ya ha dado la orden para que autoricen todas las terrazas que soliciten y cumplan con los parámetros acordados.
¿Cómo valora que las actuaciones de la extrema derecha hayan llegado a la ciudad que la que es alcalde?
- Han llegado a la ciudad pero son dos gatos, dato con el que me siento muy congratulado. ¿Qué me parece? La verdad es que no me parece nada bien en un contexto donde lo importante es la salud colectiva y la salida cuanto antes de esta situación creo que es momento de arrimar el hombro, pero no de optar por una estrategia de acoso y derribo como ha tomado la derecha y la ultraderecha fascista de este país. Creo que tenemos mucho que aprender si la sociedad de derechas de este país se conforma con una derecha tan traicionera a poner la zancadilla todo el tiempo y a utilizar sin escrúpulos la muerte y la desgracia a asola a miles de familias.
Uno de los cambios que deberá adoptar la sociedad postpandemia es el reforzamiento de la sanidad pública. ¿Aquí no es el momento de volver a reclamar el nuevo hospital de Cádiz?
- Yo creo que siempre es el momento para reclamar el nuevo hospital de la ciudad de Cádiz, pero creo que es mucho más importante y más urgente garantizar que toda la provincia tenga acceso a hospitales públicos. Y en segundo lugar, no creo que el apoyo a la sanidad pública se traduzca únicamente en infraestructuras, sino en inversión, calidad de los profesionales y de sus condiciones laborales, en más ayudas para investigación, en I+D+I para que nuestros cerebros no se vayan a otros países. Creo que ahí es donde prima el apoyo a la sanidad pública.
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