El concejal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Sevilla, Lorenzo López Aparicio, ha pedido este domingo al gobierno municipal que "consensúe el inicio de las obras previstas en la calle Cuna con los vecinos y comerciantes", de modo que "se pueda llegar a un acuerdo" que "evite molestias innecesarias y el cierre masivo de negocios por la pérdida de ingresos".
En este sentido, ha advertido en un comunicado de que, "según trasladan algunos comerciantes, la intención de Urbanismo es autorizar las obras para que comiencen entre finales de septiembre y octubre, lo que supondría la puntilla definitiva para unos negocios que se verían casi abocados al cierre".
López Aparicio ha señalado que los comerciantes de la calle Cuna están "inquietos ante este escenario de incertidumbre, ya que, según denuncian, desde el Ayuntamiento de Sevilla ha habido falta de claridad e información sobre el inicio y, especialmente, la duración de estas obras".
A todo ello se suma, además, "su falta de participación en todo el proceso", lo que, según López Aparicio, "hubiera derivado en un acuerdo beneficioso entre todas las partes que permitiera ejecutar las obras a la mayor brevedad posible sin afectar negativamente a la venta de los comercios de esta calle".
El concejal de la formación naranja en el Consistorio hispalense ha indicado que "la dramática situación de autónomos y pymes por la crisis del Covid-19 agrava aún más este problema". Así, ha añadido que "los negocios de la calle Cuna, como los del resto de la ciudad, ya han perdido las ventas de la primavera pero si las obras empiezan tras el verano perderán también los clientes del otoño, lo que será su ruina definitiva".
Por ello, ha pedido al equipo de gobierno "sentido común" a la hora de fijar el calendario de estos trabajos, ya que "el Ayuntamiento debe fomentar soluciones y no poner trabas al comercio en un momento en el que resulta vital la reactivación de su actividad generadora de empleo y de riqueza".
López Aparicio ha insistido en que "la primera fase de estas obras de Endesa, que afectaron a la Plaza del Salvador, se iniciaron el pasado verano", pero indica que "hubo que pararlas al encontrarse huesos de diversos enterramientos".
Según explica, esto provocó que "la segunda fase, que incluía Cuna hasta la esquina con la calle Cerrajería, acabara dilatándose en el tiempo". Así, ha remarcado que "este retraso no debe empujar a Urbanismo a tomar decisiones precipitadas" sino a "buscar una fecha que, sin perjuicio para vecinos ni comerciantes, permita acometer las obras con todas las garantías".
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