La Junta de Andalucía ha propuesto al Gobierno central que 24 áreas sanitarias de la comunidad autónoma puedan empezar directamente en la fase 1 el proceso de desescalada por etapas que ha diseñado el Ejecutivo en la crisis del coronavirus, por su bajo índice de contagios.

El consejero andaluz de Salud y Familias, Jesús Aguirre, ha formulado esta propuesta durante su intervención en el debate que se celebra este jueves en la Comisión General de las Comunidades Autónomas del Senado, en la que ha representado a la Junta y en la que el Gobierno y las autonomías debaten sobre la gestión de la crisis causada por el coronavirus.

El consejero de Salud ha defendido que las cifras de la incidencia del coronavirus en Andalucía son "positivas" de cara al desconfinamiento, tanto "a nivel de ratio", como de "camas libres y hospitales", de ahí que la comunidad "se ofrece para esa primera fase a nivel de provincias", con los casos de Huelva y Almería, pero también con "24 distritos o áreas sanitarias en las que proponemos al Gobierno entrar en fase de desescalada, ya que el índice de contagios es menor de diez casos por 100.000" en dichas áreas, según ha apuntado el consejero.

Ya este miércoles, el Gobierno andaluz planteó oficialmente al Ejecutivo central que las provincias de Almería y Huelva se incorporen a la fase 1 de desescalada desde este lunes 4 de mayo y no a la fase 0 como el resto de provincias andaluzas.

Por otro lado, Jesús Aguirre, que ha lamentado que la Comisión General de las Comunidades Autónomas no se hubiera convocado antes de la declaración del estado de alarma, ha dedicado la mayor parte de su intervención a repasar las cuestiones que "hemos aprendido" en este tiempo de crisis.

Entre ellas, ha señalado que el coronavirus es "tiempo-dependiente", de forma que "el tiempo que se tarda en tomar una decisión repercute" en el volumen de ingresos o en los contagios y fallecimientos que se puedan registrar, y al respecto ha indicado que Andalucía, donde "quizá veníamos picardeados" por la alerta sanitaria de la listeriosis del pasado verano, puso en marcha ya el 27 de enero un grupo de trabajo por el coronavirus.

"Lo primero que hicimos fue pedirle a hospitales y distritos sanitarios que prepararan un plan de actuación ante una posible epidemia de coronavirus", ha destacado el consejero, quien también ha agregado que de esta crisis "hemos aprendido que la información que mandaban de China no era correcta" y "la morbimortalidad que nos decían (del coronavirus) no era" tal, sino mayor.

El consejero de Salud ha defendido que Andalucía ha sido "fiel y leal" al Gobierno central, "pero siempre con la política de 'a Dios rogando pero con el mazo dando'", es decir, sin dejar de hacer en la comunidad autónoma un trabajo propio para el abastecimiento de equipos de protección individual (EPI) o respiradores, "actuando de una forma lo más autónoma posible, proactiva, no dejando nada a la improvisación".

EL MANDO ÚNICO "NO HA FUNCIONADO" Y HA SIDO "UN DESASTRE"

En ese sentido, ha criticado que el mando único que ha llevado aparejado el estado de alarma "no ha sido en sí la solución", ya que ha ido dictando "protocolos que iban cambiando muchas veces de un día a otro".

"Ha faltado concreción y seguridad en el Gobierno en su toma de decisiones", según ha opinado Aguirre, que ha agregado que el mando único "no ha funcionado como tenía que haber funcionado, y en muchas ocasiones ha sido un desastre y ha creado desconfianza y falta de seguridad".

Al hilo, también ha criticado la "confiscación", por parte del Gobierno central al inicio del estado de alarma, de "la fábrica que abastecía de mascarillas" a Andalucía, ubicada en Alcalá la Real (Jaén), que "ya está funcionando de nuevo para Andalucía", según ha recordado el consejero, quien ha presumido además de que la comunidad ha conseguido la "autosuficiencia" en materia de EPI, test de PCR o respiradores, poniendo a las pymes andaluzas a "trabajar en la fabricación" de esos materiales.

Por otro lado, ha indicado que la crisis ha evidenciado que "el eslabón más débil de la cadena epidemiológica son los mayores, los pacientes crónicos y pluripatológicos, y las residencias de mayores", y al respecto ha puesto de relieve que Andalucía intervino sanitariamente las residencias de mayores desde el 4 de marzo.

Asimismo, ha destacado que la Junta ya se ha puesto a trabajar de cara al próximo otoño e invierno, ante la posibilidad de que "puedan coincidir una epidemia de gripe y una de coronavirus", para lo que se está "intentando aumentar stockaje para que tengamos un mínimo equivalente a seis meses de consumo a nivel de EPI". Además, la Junta está "centralizando en Antequera (Málaga) un centro específico de respiradores", y se están impulsando "unidades específicas para pacientes con problemas respiratorios a nivel de cuidados intensivos".

"UN GRAN ACUERDO DE RECUPERACIÓN"

Ante la "crisis económica" que lleva aparejada la sanitaria, el consejero ha considerado que "es imprescindible un gran acuerdo de recuperación que hay que hacerlo entre todos los partidos y liderado por el Gobierno y todas las comunidades autónomas".

Finalmente, el titular andaluz de Salud ha dedicado palabras de felicitación a quienes "se han jugado su vida" y lo siguen haciendo en esta crisis, así como de recuerdo a los fallecidos por el coronavirus.

"Si hay una cosa que no hemos aprendido es a llorar a nuestros muertos", a quienes "no hemos velado", según ha lamentado el consejero, quien cree que esa es una "asignatura pendiente que tenemos con todos ellos", con los fallecidos, que "son personas", según ha remarcado, y al hilo ha dedicado un recuerdo expreso al médico Pedro Francisco Marín, de 47 años, muerto por coronavirus y que desempeñaba su labor como médico del servicio de Urgencias del Hospital San Juan de la Cruz, en Úbeda (Jaén). El consejero ha concluido enfatizando que "tendremos siempre en la memoria" a los fallecidos en esta pandemia.