La caza representa en Andalucía un tercio del valor económico de los ecosistemas de la comunidad y es, junto a los pastos, el principal aprovechamiento de los montes andaluces, ya que supone cada año más de 3.582 millones de euros y más de 50.000 jornales en el medio rural. Pero no está exenta de la crisis. De hecho, los organizadores de caza mayor, que comenzaba este fin de semana, sortearán la coyuntura económica reduciendo los precios y el número de monterías.
Una de las zonas que más sufrirá la incidencia de la crisis será la provincia de Jaén, que cuenta con cuatro Parques Naturales y donde la actividad cinegética mueve al año unos 200 millones de euros y genera 20.000 jornales.
Este año, según apuntaba a Efe el delegado de Medio Ambiente en Jaén, José Castro, se han otorgado casi 1.900 permisos de caza en los cotos públicos, y hasta el momento hay 202 autorizaciones para batidas de jabalíes y de ciervos, un número “ligeramente inferior” al de años anteriores aunque habría que esperar a que finalice la temporada en febrero para saber si realmente se han reducido, porque una montería se puede solicitar con quince días de antelación.
Pero el sector comienza ya a adoptar medidas contra la crisis. Así, en la localidad jiennense de Andújar, que cuenta con 78 cotos de caza mayor, las empresas que se dedican a la organización de esta actividad cinegética han optado por reducir sus calendarios “adaptándose a las circunstancias actuales”.
Según José Vicarías, representante de Vicarcaza, aunque el número de monterías de esta temporada, unas 17, será aproximadamente el mismo que el año anterior si ha bajado mucho el precio y “lo que antes valía cuatro hoy vale dos”, además se han contratado más la caza de jabalíes que de venados.
Asimismo, asegura que han trabajado por buscar alternativas y clientes en otros lugares ante la bajada de la demanda, pero es que además para el año que viene las expectativas, según Vicarías, “son muy malas”.
Por su parte, la empresa Hermanos Chamocho y Sierracaza han optado por ofertar menor número de monterías, como lo aseguran en su página web, en la que señalan la necesidad de mantener “los precios de temporadas anteriores”, y de “buscar soluciones a los monteros para que puedan seguir acudiendo al monte” adaptándose a “la nueva situación económica”.
Especies estrella
Con dos especies estrella -el ciervo y el jabalí- Andújar y su Parque Natural situado en el corazón de Sierra Morena, ha sido tradicionalmente uno de los mejores destinos de España para la caza mayor, algo que recuerda a los visitantes un monumento a la entrada de la ciudad.
Aunque la sierra de Andújar acoge un número aproximado de 70 monterías al año, a las que acuden unas 2.000 personas, este año la cifra será inferior.
Según la Consejería de Medio Ambiente, la caza representa un tercio del valor económico de los ecosistemas andaluces y es, junto a los pastos, el principal aprovechamiento de los montes andaluces, ya que supone cada año más de 3.582 millones de euros y más de 50.000 jornales en el medio rural.
Este valor económico y medioambiental era resaltado hace apenas un mes por la consejera del ramo, Cinta Castillo, en la inauguración de la tercera edición de la Feria de la Caza y la Pesca de la Provincia de Jaén, un certamen cinegético cuya importancia destacaba para poner a Andalucía “en primer plano de la actualidad cinegética” y para “consolidar la apuesta de la administración ambiental andaluza por la caza y la pesca como valiosos recursos orientados a la sostenibilidad económica y social”.
Según Castillo, esta ferias “responden a la demanda del amplio colectivo de cazadores y pescadores y ayudan al resto de la sociedad a dimensionar en su justa medida estas actividades”.
Preservación de la biodiversidad
Además de su valor como motor de desarrollo social y económicamente sostenible, Castillo recordaba que la caza y la pesca continental son esenciales para la gestión del medio natural e inciden directamente en la preservación de la biodiversidad.
Con este objetivo, la Junta ha puesto en marcha diversas iniciativas para fomentar la sostenibilidad de la actividad cinegética, entre ellas la presentación de un manual dirigido a gestores y propietarios de fincas que incide en la necesidad de compatibilizar esta prácticas con el respeto al medio ambiente.
Además, en Jaén y Córdoba se iniciarán el próximo año las primeras actuaciones relacionadas con el Plan de Gestión y Reintroducción del Corzo en Andalucía, que busca consolidar e incrementar el área de distribución de esta especie en la comunidad autónoma.
Una cátedra específica
Tal importancia adquiere la caza en nuestra región que el pasado 1 de octubre la Junta presentaba la Cátedra de la Actividad Cinegética y Piscícola puesta en marcha con la Universidad de Córdoba (UCO), que se convierte en la primera de este tipo que se centrará en buscar soluciones a las dificultades que presenta la caza y la pesca en la actualidad.
El director de la cátedra, Juan Carranza, indicaba en la presentación que uno de los principales problemas a los que se enfrenta la caza es la intensificación de la gestión en las especies, ya que que “no se trata de producir más animales cazables porque hay más demanda”, sino de hacer compatibles las gestiones intensiva con la conservación del entorno.
Para lograr esta compatibilidad, la cátedra estudiará cuáles son las fórmulas posibles para cubrir las demandas de caza cada vez mayores, pero teniendo en cuenta el respeto al medio ambiente y atendiendo a los problemas derivados de “avatares” de las especies, como las enfermedades que han afectado a los conejos o a las aves migratorias que llegan a Andalucía.
Casi 18.000 personas de toda España están acreditadas para cazar en la Comunidad
La consejera de Medio Ambiente, Cinta Castillo, informaba el pasado mes de septiembre de que existen 17.728 cazadores con licencia de la Comunidad Autónoma de Andalucía, que residen en algunas de las regiones firmantes del convenio sobre reconocimiento recíproco para esta práctica.
Este convenio está suscrito por las comunidades autónomas de Andalucía, Aragón, Cataluña, Castilla y León, Islas Baleares y Valencia e incluye las licencias de caza y pesca recreativa en aguas interiores. El convenio, que requiere de la autorización del Gobierno andaluz, evitará que los pescadores y cazadores en España se vean obligados a repetir los mismos trámites y gestiones administrativas en cada una de las comunidades autónomas donde deseen cazar y pescar.
Según Castillo, esto permitirá a las administraciones reducir los gastos asociados a estos trámites burocráticos y lograr así una gestión más eficiente de los recursos públicos.