El proyecto de Fondo de Barril que Cepsa quiere implantar en la refinería de San Roque volvía ayer a la fase de información pública y consultas, según publicaba el Boletín Oficial del Estado (BOE).
Esta actuación que contará con una inversión de casi 1.000 millones de euros en los próximos tres años, fue declarado por la Junta de Andalucía como proyecto de interés estratégico, ya que supondrá un “importante impulso para el empleo y la actividad del Campo de Gibraltar”, una “zona prioritaria” para el Ejecutivo andaluz en la puesta en marcha de medidas de reactivación económica.
El BOE mostraba ayer en su página oficial que el proyecto de Cepsa se somete de nuevo a información pública y de consultas a las Administraciones Públicas afectadas , de acuerdo con lo establecido en la Ley del Estudio de Impacto Ambiental de la actuación, dado que tras la incorporación al mismo de una modificación podría suponer efectos ambientales no contemplados en el trámite realizado previamente.
Por lo tanto el objetivo de esta nuevo inclusión en el BOE es valorar el impacto ambiental que las actuaciones de la refinería puedan crear en el espacio designado para su desarrollo. La modificación consiste fundamentalmente en la incorporación al documento Proyecto Básico Ordinario de Obras de Urbanización de Preparación de las Parcelas Industriales Área CP2.PEI en la Refinería Gibraltar-San Roque. Proyecto Fondo de Barril de la siguiente información: superficie de metros cuadrados afectada por el proyecto Fondo de Barril, descripción de las obras necesarias de acondicionamiento de terreno, así como un plano que indique desmontes, terraplenes y aplanamiento necesarios, cálculo de las tierras a extraer para acondicionamiento del terreno e impacto ambiental del movimiento de tierras.
A su vez, para valorar el impacto ambiental, se ha incluido una adenda al Estudio de Impacto Ambiental que ya había sido sometido a información pública y consulta a las Administraciones Públicas afectadas.
El Fondo de Barril no supondrá, detallaba la publicación del BOE, un incremento de la capacidad de refino de la refinería sino una redistribución en la producción a favor de las fracciones más ligeras de mayor valor añadido. Además dotará a la refinería de la más moderna tecnología, con el objetivo de adaptarse a los recientes cambios regulatorios que está experimentando el mercado de combustibles. Asimismo, desde la Junta argumentaban que su puesta en marcha generará numerosos puestos de trabajo.
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