Sobre las 12.00 horas del pasado martes 1 de octubre se registró un desprendimiento en la peña de Arcos por causas desconocidas, localizado entre la parroquia de San Pedro y la iglesia de San Agustín.
Como consecuencia del desprendimiento, cayó una importante cantidad de piedra arenisca desde el macizo arcense a la antigua carretera de Debajo de la Peña, sin que afortunadamente hubiera que lamentar daños personales. No obstante, el escenario de estos hechos es un lugar de cierto paso de los vecinos que recorren los senderos que discurren junto al río Guadalete.
El suceso pone de nuevo en evidencia la aparente fragilidad de la peña de Arcos -declarada monumento natural de Andalucía-, ya que desde diversos lugares se puede apreciar varias zonas que parecen se pueden desprender en cualquier momento. El suceso ha dejado a la vista una zona de la peña de un color más oscuro, es decir, provocado supuestamente por la humedad que ha hecho caer las piedras como consecuencia de filtraciones de agua.
Un vecino logró captar el momento del desprendimiento con su teléfono móvil, grabación en la que se puede comprobar la gigantesca nube de polvo como consecuencia de la caída de piedras.
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