Fueron dos horas largas de marcha pacífica, ordenada, en la que varios miles de jerezanos (ocho mil según Protección Civil, casi once mil según los sindicatos) pusieron en evidencia el deseo de una ciudad entera... Hasta 166 organizaciones diferentes hicieron saber en estos últimos días que no quieren que la multinacional francesa Saint Gobain-Vicasa cierre su fábrica de Jerez. Y esa gran representación de entidades tuvo su reflejo en la calle, convertida en una nueva marea azul que tiñó de indignación, pero también de esperanza, el recorrido entre la plaza del Arenal y El Pelirón.
Que la manifestación iba a ser multitudinaria se intuía ya desde primeras horas de la tarde. Decenas, cientos de personas, muchas en familia, con niños, fueron confluyendo poco a poco en el Arenal, vestidos todos con camisetas azules, portando todos también banderas azules y blancas con un mismo lema “Vicasa en Jerez sí”.
Y con ellos, ciudadanos anónimos, caminaron una nutrida representación política y social de la ciudad, de la provincia...
Difícil hacer una relación de ellos sin olvidar a nadie. Alcaldesa; presidente de la Diputación; concejales del Ayuntamiento de Jerez, del Gobierno y de la oposición; alcalde de Trebujena; Coordinador provincial de IU; Coordinador andaluz de esta formación política; presidente del Xerez Deportivo; líderes sindicales locales y provinciales, compañeros de Vicasa Sevilla...
El éxito se intuía nada más comenzar y las primeras declaraciones de los participantes, todavía comedidas, se fueron sucediendo y animando a medida que la cabecera avanzaba por la calle Corredera y se iba conociendo que la cola seguía estática en la plaza del Arenal. En las Angustias ya se sabía que iban a ser varios miles, y en Madre de Dios, era público y notorio que la manifestación había sido un éxito.
Al final, llegó el momento de las valoraciones finales, entusiastas y comprometidas con el futuro. Los sindicatos agradeciendo la participación y soñando con lograr el objetivo final, la alcaldesa pidiendo que la unidad siga y el presidente del comité dispuesto a seguir trabajando hoy.
El único ‘pero’, el lugar elegido para acabar. Insuficiente, inapropiado para recoger a los miles de personas que llegaban. El aparcamiento, que hubiera sido pequeño para albergar a tantos miles de personas al final sobró, porque muchos se quedaron fuera y otros se marcharon.
Hoy continua la lucha
De la experiencia de ayer destaca la unidad de acción que unos y otros pidieron que se mantenga hasta el final.
Y entre ayer y lo que suceda finalmente, quedan muchos pasos, el primero hoy, en la sede del Ministerio de Industria, donde el presidente del comité, Antonio Alba exigirá, cuando menos, que si Vicasa termina yéndose no se lleve nada de Jerez.
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