Las personas mayores andaluzas contarán, a partir del año que viene, con un plan específico que garantizará que contarán con una “asistencia digna” en una sociedad que camina hacia un progresivo envejecimiento. El documento, que tendrá vigencia entre 2020 y 2023 aunque se irá prorrogando y mejorando posteriormente, llega 20 años tardes, ya que la Ley de Mayores se aprobó en 1999 y estipulaba que dicho plan tendría que ponerse en marcha al año de su entrada en vigor.
El Consejo de Gobierno aprobó este martes la elaboración de este Plan Estratégico, que ahora desarrollará la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación con la prioridad de “darle un trato preferente a los mayores”. Así lo transmitía el portavoz del Gobierno andaluz, Elías Bendodo, quien no ocultaba que “preocupa el envejecimiento” hacia el que camina la sociedad andaluza.
En la actualidad el 16,4% de la población en Andalucía tiene más de 65 años, una cifra que casi se duplicará en 2040, cuando supondrá el 28,6%. Los mayores de 80 años, por su parte, son el 4,9%, una cifra que crecerá hasta el 4,9 años para esa misma fecha de referencia.
Así que la sociedad andaluza es cada vez mayor, “y hay que hacer frente a esta situación”. De ahí este plan, que será un instrumento de planificación que aborde el reto del envejecimiento poblacional de manera integral.
Bendodo señalaba que los mayores “han sido el soporte esencial de las familias durante la crisis, y ahora hay que reconocerles ese papel”. Por ello, reiteró que la Junta no se va a quedar “de brazos cruzados” y va a garantizar el “buen trato a los mayores. Es un gran desafío y tenemos que estar a la altura”.
Las claves del plan serán la prevención y la garantía de un cuidado integral y continuado. Y todo ello con una perspectiva de género, ya que el 54% de los mayores son mujeres, una cifra que se dispara hasta el 63% al superar los 80 años.
