Provincia de Cádiz

"Todo merece la pena al ver la sonrisa con la que acaban"

Escolares del Aula Específica del IES Antonio Muro participan en el proyecto Activa Acuática de Solo Surf

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Estela y Pablo son dos alumnos del Aula Específica del Instituto Antonio Muro de Puerto Real. Y el jueves podría pensarse que estaban saltándose alguna clase porque durante más de una hora estuvieron metidos en el agua, cogiendo olas. Pero no, ellos son de los afortunados que pueden disfrutar del surf terapéutico que ofrece la asociación gaditana Solo Surf como una asignatura.

La mañana era espléndida. Un sol de justicia con una suave brisa y una playa para ellos solos: Santa María del Mar. En la orilla, unas madres disfrutando de cómo sus hijos eran capaces, en su primera experiencia con una tabla de surf en el mar, de ponerse en pie y llegar hasta la orilla. Aplausos, emociones contenidas y orgullo son algunas de las palabras que podrían describir lo ocurrido en la orilla. Mientras tanto, dentro del agua, con sus trajes de neopreno, monitores acompañando a los alumnos, estudiantes de San Felipe Neri en prácticas y Arancha, la tutora de estos dos  alumnos del Antonio Muro. Dentro del agua se abrazaban y chocaban las palmas de las manos como símbolo de la victoria ante esta nueva hazaña cometida por Pablo y Estela. Dos jóvenes que aseguraban sentirse libres  y que desean volver una y otra vez a disfrutar de esta nueva asignatura que les permite interactuar fuera de las cuatro paredes, conocer un entorno en el que pueden desarrollar parte de su vida y trabajar las emociones. Una asignatura que denominaron “favorita” y que les gustaría disfrutar más años.

Isabel, la madre de Pablo, que en junio cumple 18 años, se mostraba encantada con esta actividad, con la reacción que estaba provocando en su hijo, “con las ganas que tiene de venir”. Para esta madre, “es alucinante ver cómo se sube encima de una tabla”.  

Solo Surf es una asociación gaditana que hace poco celebraba su décimo aniversario y que a día de hoy sigue planteando iniciativas que la convierten en pionera y exclusiva en el panorama nacional. Un ejemplo, este programa llamado Activa Acuática, donde ya participan dos institutos de la Bahía de Cádiz: el Drago y el Antonio Muro.

Los alumnos llegaban acompañados por su tutora del Aula  Específica. “Estela y Pablo son alumnos que terminaron Primaria y se encuentran en un centro ordinario, trabajando en un Aula Específica”. La experiencia con Solo Surf está siendo “maravillosa, y para completar el aprendizaje del aula es increíble”. Para su autonomía y gestión de las emociones, las experiencias en entornos diferentes… Es más que recomendable”. El personal de esta asociación es “profesional” al máximo, y “complementa el trabajo de la educación especial”.

El surf terapéutico se ha incluido “dentro de los objetivos curriculares de las aulas específicas. Venimos trabajando desde hace un año en este proyecto cuando nos planteamos desarrollar curricularmente nuestros programas”, explica el director técnico, Jesús Borrego. Es una actividad pionera y exclusiva que requiere avales de calidad, profesionalidad, seguridad para poder trabajar de una manera profesional con los propios institutos.

Estefanía Bustos, es jefa de equipo y coordinadora del programa. “le damos fuerza de motivación, autocontrol, confianza, autoestima. Son capaces de hacer cosas dónde, cuándo y cómo las hacen los demás, pueden usar los espacios comunitarios como cualquier otro usuario”. Se nota cómo avanzan. Hay veces que llegan con miedos ante la incapacidad de poder realizar la actividad y “por eso trabajamos con colores, adaptamos la sesión con sus estados emocionales y a su ritmo de aprendizaje”, explica la psicóloga. El cambio es “brutal, sólo por ver la sonrisa ya merece la pena”.

El día acababa con un ‘megabaño’, relajados después de esta sesión de surf donde habían conseguido disfrutar de este arte que se llama coger olas.

El modo

Las sesiones de trabajo siempre contemplan una “rutina, un protocolo de trabajo que consiste en que desde que se llega hay que cambiar el concepto de aula y alumnos a participantes y Solo Surf”, explicó el director técnico de la asociación, quien añadía que “hay que trabajar con ellos de una manera previa, a través de vídeos, recursos con los que planificamos qué tienen que ir haciendo para trabajar de manera significativa”. Se valora el “qué hago y la gestión de emociones, el estado de la playa y cómo vienen los participantes”.

Después vienen los trabajos básicos, de manera autónoma en los vestuarios y después lo que es el trabajo de la actividad. Se tiene en el agua y en seco para trabajar con actividades funcionales entre sí. Hay un calentamiento, una serie de ejercicios que sirven de forma funcional para su inmersión en el agua.

En este caso era ponerse en pie y mantener la posición en la tabla. A partir de ahí, se hacen nuevos ejercicios y se vuelve al agua. Con esto se consiguen la capacidad de aprender y visualizar su cuerpo, usarlo, tomar decisiones de una manera abstracta, a través del deporte. Borrego explicaba que “hay una diversidad funcional donde tenemos que tener muy en cuenta el uso pedagógico que se haga”.  De esta manera, se consigue la práctica de surf, utilizando “nuestras adaptaciones y metodologías”.

Después hay un tiempo de relajación, para gestionar las emociones, después de la actividad físico-deportiva. Se despiden y se vuelve a  crear el sistema profesor -alumno, con el que llegaron los jóvenes. 

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