Los bomberos de la Diputación Provincial de Sevilla rescataron el pasado fin de semana a una mujer de 72 años que se había caído a un pozo de 26 metros de profundidad en el municipio de Villanueva del Río y Minas, del cual fue extraída con síntomas de hipotermia que obligaron a su hospitalización. Este caso vuelve a poner de manifiesto tras la muerte del niño Julen en Totalán el enorme peligro que entrañan los pozos de todo tipo perforados en nuestra provincia y, por extensión, en el resto de Andalucía y de España, y cuyo número y ubicación no se conoce con exactitud, entre otras razones porque bastantes de ellos se han hecho sin permisos administrativos y están por tanto fuera de la ley.
A raíz del caso de Julen, que conmovió al mundo, vecinos y ayuntamientos han emprendido campañas de localización, señalización y/o sellado de perforaciones clandestinas. Estas iniciativas ya han dado fruto en Carmona, Mairena del Aljarafe y Espartinas. Asimismo, la Asociación de Técnicos de Protección Civil de Andalucía ha pedido la colaboración ciudadana y abierto un registro en su página web para canalizar las denuncias. Hacemos nuestro el llamamiento del delegado del Gobierno, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, de cooperar entre todos a la detección y clausura de pozos ilegales y de aplicación de medidas de seguridad en el resto para que jamás se repita un caso como el de Julen.
