El Defensor del Pueblo, Francisco Fernández Marugán, ha lamentado que, por parte del Estado español, no se haya generado una infraestructura de primera asistencia a los migrantes que llegan a las costas españolas en tres décadas.
"Podíamos estar mejor, porque hace 30 años que se encontró el primer cadáver en la zona de Tarifa", ha reconocido Fernández Marugán en una entrevista en RNE recogida por Europa Press. Para el Defensor del Pueblo, el Estado tiene un "problema realmente serio" con la inmigración sin contar con las "redes (de asistencia) suficientes", porque España se convierte en puerta de entrada "cuando se producen avalanchas (en las vallas de Ceuta y Melilla) y se cierran las rutas europeas del este y de Lampedusa".
Ante esta situación, el Defensor del Pueblo elaborará un informe "con cierta prontitud" sobre la situación existente en el Golfo de Cádiz y el mar de Alborán, al ser las zonas que han experimentado una mayor presión migratoria.
Pese al aumento en el número de entradas de migrantes en situación irregular, Marugán no considera que exista "un incremento espectacular" y ha asegurado que "los extranjeros contribuyen al bienestar de la sociedad".
En cuanto a las devoluciones en la frontera de Ceuta y Melilla, ha defendido la asistencia letrada a los migrantes y la necesidad de evitar el retorno de personas a países en los que corre el riesgo su vida. "Es responsabilidad de las autoridades españolas procurar que no se lancen (a los migrantes) a un mundo peor del que venían", ha concluido Marugán.
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