Así lo manifestó ayer la consejera de Educación, Mar Moreno, al término de una reunión con miembros de la Comisión Permanente del Consejo Escolar de Andalucía, con sede en Granada, a la que también ha asistido la consejera de Salud, María Jesús Montero.
Moreno indicó que si en alguna ocasión, "por cualquier circunstancia sanitaria o de otra naturaleza", es recomendable el cierre de cualquier centro "estaríamos ante hechos extraordinarios que de momento no están vinculados ni siquiera a la gripe A".
Al respecto se pronunció también la consejera de Salud, quien explicó que la comunidad científica no ha establecido, tras estudiar esa posibilidad, ningún límite en cuanto al número de niños a partir del cual se haría recomendable el cierre de un aula o de un centro educativo, por lo que, llegado el momento, el criterio que imperaría sería "el sentido común".
En su opinión, si se diera el caso, las posibles medidas a adoptar serían más de "ordenación académica" que de actuación sanitaria.
La Consejería de Educación tampoco ha previsto un sistema excepcional de sustituciones ante hipotéticas bajas del profesorado por la gripe A, sino que continuará con el habitual porque, según incidió Moreno, contemplan un escenario de evolución de la gripe "muy similar al de otros años".
La primera medida que impulsará la Consejería de Educación, recordó, será una campaña informativa en todos los centros educativos andaluces, entre los que ya está dando a conocer una serie de instrucciones, fundamentalmente recomendaciones y pautas higiénico sanitarias "elementales", basadas en un patrón común.
Aunque no habrá medidas excepcionales, Educación sí ha previsto que cada centro escolar cuente entre el equipo directivo con un coordinador que se encargue de manera más especial de la divulgación de la información entre la comunidad educativa.
Vacunas para los profesores
Sobre la petición de algunos sindicatos de que el profesorado, que no ha sido incluido entre los grupos de riesgo, pueda vacunarse de forma voluntaria, la consejera indicó que las decisiones al respecto han sido adoptadas por "unanimidad" de todas las comunidades autónomas y que la cuestión de a quién se vacuna "no es una decisión política ni educativa, sino científica".
Serán las autoridades sanitarias las que determinen en cada momento cuáles son los segmentos de población prioritarios para ser vacunados, según Moreno, que recalcó que "en ningún lugar de Europa se están tomando decisiones diferentes a las que se están adoptando en España".
Todas estas indicaciones fueron trasladadas ayer al Consejo Escolar de Andalucía, cuyo presidente, Ernesto Gómez, consideró que la información facilitada por ambas consejerías y basada en "datos científicos" contribuirá "a serenar los ánimos y clarificar las ideas" entre la comunidad educativa.
En concreto, la consejera de Salud les trasladó que en más del 95 por ciento de los casos la gripe cursa con sintomatología leve.
La Consejería de Salud activará el Plan de Alta Frecuenciación en el momento en el que la tasa de gripe provoque un aumento de usuarios en el sistema sanitario, según Montero.
Aunque habitualmente es en torno a los meses de noviembre o diciembre cuando más se incrementa el número de usuarios como consecuencia del virus de la gripe, Salud ha previsto este año adelantar la activación del plan, en sus distintos niveles, a octubre o noviembre.
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