La Junta de Andalucía ha invertido cerca de 1,9 millones en las escuelas de verano en las que han participado más de 5.169 niños, según la Consejería de Igualdad y Políticas Sociales, que ha recordado que este verano se ha ampliado y reforzado este servicio de comidas que se ofrece a menores durante la época estival. La edición de 2018, que acaba de concluir, ha contado con 75 escuelas.
Las escuelas de verano han funcionado desde julio hasta finales de agosto gestionadas por entidades sociales sin ánimo de lucro y preferentemente en Zonas con Necesidades de Transformación Social.
Por provincias, según los datos facilitados por el departamento que dirige María José Sánchez Rubio, la distribución ha sido Almería (10 escuelas y 750 niños y niñas participantes), Cádiz (10 escuelas y 679 menores), Córdoba (7 y 560), Granada (10 y 605), Huelva (4 y 164), Jaén (7 y 380), Málaga (114 y 1.010) y Sevilla (13 y 1.021).
Además, para llevar a cabo la iniciativa se ha contratado a 501 profesionales (421 en 2017), durante los meses de julio y agosto, tratándose en la mayoría de los casos, de personas residentes en los barrios en los que se ha desarrollado el programa.
Las Escuelas de Verano se iniciaron en 2013 en desarrollo del Decreto-ley 7/2013, de 30 de abril, de medidas extraordinarias y urgentes para la lucha contra la exclusión social en Andalucía, dentro del Plan Extraordinario de Solidaridad y Garantía Alimentaria, con el fin de garantizar las necesidades alimentarias básicas de personas y familias en situación de exclusión social o en riesgo de estarlo.
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