Susana Díaz acaba de aceptar pulpo como animal de compañía. Reclamaba 4.000 millones por una financiación justa y acepta 500 millones para poder seguir jugando a que con
Sánchez las cosas son diferentes que con
Rajoy.
Aunque no está tan claro que lo sean. El PP de
Casado, que no es Rajoy, tiene que dar su visto bueno en el Senado, en el que sigue teniendo mayoría absoluta, a la ampliación en dos décimas del margen de déficit anunciada por el Gobierno de Sánchez, porque de ahí saldrán, si salen, 350 de los 500 millones que este lunes dio por hecho Díaz que se traía de Madrid.
Y los otros 150 millones saldrán, según el compromiso adquirido por el Gobierno con la Junta, de la liquidación de las
entregas a cuenta. Sí, sí: a cuenta. Es decir, un adelanto que lo que tendría que venir, en cualquier caso.
Del resto de los compromisos, qué decir. El PSOE inaugurará el
AVE a Granada que hizo el PP, pero ni siquiera hay una fecha. La firma de un acuerdo entre el Gobierno de España, la Junta y el Ayuntamiento de Sevilla sobre el metro es un compromiso que sólo pone por escrito (pondrá, cuando se firme) lo ya apalabrado con el anterior Ejecutivo...
De los 7 millones en seguridad que se destinarán al
Campo de Gibraltar, 5,5 millones son de personal, es decir, efectivos retraídos de otros destinos para que realicen su trabajo allí. Para el
Plan Especial de Empleo para Andalucía en los PGE de 2019 ni siquiera se apunta cuánto dinero se destinará. Defender la aceituna de mesa y un compromiso sobre la PAC para que Andalucía no pierda le corresponde a la UE. Y al Gobierno, es obvio, reclamarlo. Pero es
otro compromiso que no compromete a nada.
