La nueva Ley del Cine de Andalucía entra en vigor este sábado tras su publicación este viernes en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA). Se trata de una normativa que dota por primera vez de un marco jurídico a la industria cinematográfica y audiovisual en la comunidad.
Cabe recordar que esta nueva norma fue aprobada el pasado 20 de junio por el Pleno del Parlamento andaluz con la unanimidad de todos los grupos parlamentarios --PSOE-A, PP-A, Podemos Andalucía, Ciudadanos e IULV-CA--.
El desarrollo de la ley aprobada contará con una previsión presupuestaria inicial de 48,7 millones de euros hasta el año 2022 por parte de la Consejería de Cultura, a la que se sumarán las inversiones de apoyo al cine que también desarrollarán otros departamentos de la Junta.
La nueva ley contiene medidas para impulsar la alfabetización audiovisual, acercar la creación cinematográfica a las aulas, incrementar la presencia activa de las mujeres en la industria, favorecer los rodajes en la comunidad, incorporar al sector en las políticas autonómicas de internacionalización, mejorar el acceso de las personas con discapacidad y reforzar la protección del patrimonio vinculado a la actividad.
La Estrategia Andaluza para el Impulso de la Industria Cinematográfica y Audiovisual será el principal instrumento de coordinación de las políticas públicas recogidas en la ley.
En el marco de esta planificación, y atendiendo a una de las principales reivindicaciones del sector, la norma prevé la creación de un sistema de financiación estable a través de la Cartera de Recursos Económicos para la Cinematografía y la Producción Audiovisual.
Se nutrirá de los presupuestos autonómicos, del Fondo de Apoyo a las Pymes Culturales y de los fondos estatales para el cine cuya gestión corresponda a la Junta, así como de donaciones, transferencias y aportaciones, entre otras fuentes. Su labor se centrará en incentivar la creación, el desarrollo y la producción cinematográfica y audiovisual; mejorar las condiciones de exhibición, y fomentar la atracción de rodajes y la distribución, la promoción y el acceso a festivales y mercados nacionales e internacionales.
Otro de los objetivos de la ley será el apoyo a la exhibición y a la creación de nuevos públicos, ámbitos en los que se incluirán ayudas novedosas como las destinadas a apoyar la digitalización de las pantallas de cines. El nuevo marco jurídico también prevé la creación de una red cultural de salas de cine para la difusión de obras andaluzas y europeas de calidad.
En una línea similar, se implantarán estrategias de alfabetización mediática para favorecer el acceso a la cultura cinematográfica en las escuelas. Estas iniciativas se centrarán en la formación tanto de los docentes como de los profesionales.
COLABORACIÓN CON EL SECTOR
En cuanto a la creación de nuevos instrumentos de colaboración entre los poderes públicos y la industria del cine, destacan el Consejo Asesor de Cinematografía, órgano consultivo y de asesoramiento en el que participarán profesionales de reconocido prestigio, o el Centro de Información y Seguimiento de la Actividad Cinematográfica y Audiovisual, que se encargará de realizar trabajos estadísticos y de tratamientos de datos.
En el ámbito de la ordenación administrativa, destaca la creación del Registro Andaluz de Empresas Cinematográficas y de Producción Audiovisual. Entre otras funciones, este instrumento facilitará el acceso a incentivos y a la calificación y certificación de nacionalidad de las obras. También se prevé la constitución de una red de archivos con el fin de conservar el patrimonio en este ámbito.