Numerosos miembros del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT) comenzaron hoy un encierro indefinido en la oficina principal del banco BBVA en Granada y en la sede central de la Inmobiliaria Osuna para protestar por el plan de rescate de la banca emprendido por el Gobierno central. Solicitan la nacionalización de la misma y que el dinero público se destine para 'rescatar" a los trabajadores afectados por la crisis.
Así lo informó hoy a los periodistas uno de los responsables del SAT y parlamentario andaluz de IU por Sevilla, Juan Manuel Sánchez Gordillo, quien indicó que hasta la capital granadina se han desplazado sindicalistas de todos los puntos de la provincia y aseguró que, por el momento, "no se descartan emprender otras acciones reivindicativas a lo largo de la mañana".
Gordillo calificó de "desvergüenza absoluta" que el Gobierno central "se haya gastado 150.000 millones de euros para rescatar a los bancos y otros 3.000 para las grandes inmobiliarias"-- para las que reivindicó su nacionalización--, por lo que consideró que "es hora de salvar a los pobres y los débiles que están sufriendo esta crisis".
Entre las exigencias del SAT, el sindicalista y parlamentario destacó la necesidad de que el Gobierno intervenga en el mercado y apueste por las empresas e inversiones públicas, así como que se cree un fondo de unos 2.000 millones de euros que "garantice cuatro meses de empleo a las personas que trabajan en el campo y la ciudad".
"Si se han rescatado a los bancos y a las grandes inmobiliarias que lo hagan ahora con los ayuntamientos que están en bancarrota", añadió Gordillo, que apostó también por que desde el Gobierno central y autonómico se emprendan medidas para facilitar el acceso de los trabajadores a viviendas "baratas y de calidad".
Anunció que los 400 sindicalistas, según sus cifras, repartidos entre la sede del BBVA y la Inmobiliaria Osuna, unos 200 en cada oficina, continuarán con el encierro hasta que reciban "alguna respuesta favorable" de la Administración a sus reivindicaciones.