Estos vecinos aseguran llevar tres semanas sin recibir correspondencia, con cartas extraviadas o que no se entregan correctamente, tanto en las viviendas como en negocios como el supermercado o la farmacia, lo cual está penado por ley. Roca matiza que hace un año Correos obligó a los vecinos a poner buzones en las viviendas, pese a lo cual -afirma- “los hemos instalado pero seguimos en la misma situación”.
Ante esta demanda vecinal, ayer se produjo una reunión entre el Jefe de Servicios Periféricos de Correos, Antonio Ruano, el primer teniente de alcalde, Joaquín Macías, y el técnico municipal de Barriadas Rurales, con los representantes de los vecinos para llegar a un entendimiento. Del encuentro se consiguió el compromiso del Ayuntamiento para dar nombre a las calles sin denominación, así como a las zonas diseminadas, para evitar el caos existente tanto en La Misericordia como en la Junta de los Ríos.
A partir de entonces, los vecinos tendrán tres meses para cambiar sus direcciones y formalizar las nuevas. Una vez finalizados estos trabajos, Correos se compromete a que la correspondencia se entregue en la dirección correcta. Para ello los vecinos deberán hacer constar el nombre y número de la calle, barriada de La Misericordia y el código postal correspondiente a Jédula, el 11620.
En cuanto a las cartas que se han dejado de repartir en las últimas semanas, desde Correos apuntan que o bien se han devuelto o están en Jédula, donde podrán pasar a recogerlas. Con todo, como subrayó el portavoz de estos vecinos, aquella persona que pueda demostrar que ha dejado de recibir una carta con la dirección correcta y que ello le haya supuesto una penalización, pérdida económica, de una cita médica o similar, puede solicitar en Correos una hoja de reclamación, para lo que tendrá un plazo de respuesta de 72 horas.
Cortes de agua
Paralelamente, estos vecinos también han denunciado los continuos cortes de agua que padecen en la barriada, donde aseguran haber estado “hasta tres días o una semana sin agua y sin avisar”, con el consiguiente perjuicio, sobre todo para los vecinos que carecen de depósito.
Tras la reunión mantenida cesta semana con el delegado municipal de Barriadas Rurales, Isidoro Gambín, los técnicos de Gestagua arreglaron parte de la avería registrada en la zona. Al respecto, también se ha manifestado el portavoz del equipo de Gobierno, quien recuerda que la zona de la Junta de los Ríos y La Misericordia lleva más de 20 años con problemas de suministro de agua, sobre todo en verano cuando aumenta el consumo, para lo cual se va a construir un nuevo depósito de agua en La Pedrosa que dará solución a un problema histórico de estas barriadas. El mismo se ejecutará con cargo al Plan Proteja, puesto en marcha por la Junta de Andalucía.
Al mismo tiempo los vecinos agradecen que, paralelamente a las obras de acerado ejecutadas en la Misericordia, se hayan tenido en cuenta sus demandas, como la colocación de una reja para garantizar la seguridad, a falta de la colocación de los badenes, la iluminación y un espejo.
Denuncia un presunto caso de homofobia
El portavoz de estos vecinos de La Misericordia, Luis Roca, ha denunciado paralelamente un supuesto trato homófobo por parte de un operario de Gestagua que trabajaba en las averías en la barriada. Al parecer dos de estas averías en la red pública fueron arregladas, no así la tercera, que afectaba a una propiedad privada del denunciante. Según los vecinos que actuaron de testigos, el operario dijo “la avería de los maricones no la miro”. Roca está dispuesto a poner una reclamación en Gestagua y está en trámite con un abogado para ver hasta donde puede llegar, “no por el hecho de llamarme maricón, sino por negarse a hacer una reparación de una red pública de agua que está afectando a unos propietarios, independientemente de su condición sexual”.
Por su parte, desde Gestagua alegan a una “mala interpretación” para explicar lo sucedido. Aunque de antemano piden disculpas en caso de haber podido ofender a este abonado, aseguran que “no ha sido intención ni del operario ni de la empresa ocasionarle ningún daño, pues no es nuestra política”. El jefe de servicio, Miguel Durán, recuerda que Gestagua lleva 22 años prestando servicio en Arcos, ofreciendo un trato personal y lo más cordial posible, “sin dar un trato marginal ni xenófobo a nadie”. Por ello, si ha podido haber una mala interpretación, asegura que no ha sido de forma voluntaria, pese a lo que pide perdón.
Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es
