Los autónomos andaluces confían más en el crecimiento económico durante 2018 que en el resto de España, ya que más del 80 por ciento cree que su negocio se mantendrá o mejorará y uno de cada tres prevé crear empleo antes de diciembre, según el barómetro de la Federación Nacional de Trabajadores Autónomos (ATA).
El 71,3 por ciento de los autónomos andaluces consideran que la recuperación económica es un hecho y que se reducirá el paro este año, y solo un 11,9 por ciento tiene poca esperanza en la mejoría de su actividad y cree que su negocio empeorará este año.
Según las previsiones de ATA, la nueva ley estatal supondrá 9.000 autónomos más y 13.000 empleos generados, en total 22.000 puestos, y 20.000 empleos que afloren de la economía sumergida en cuatro años.
La nueva ley de autónomos es conocida por casi nueve de cada diez encuestados, que destacan las nuevas medidas de conciliación como la exención de pagas de cuotas durante la maternidad o paternidad, el cambio en las cotizaciones o la tarifa plana.
El 73 por ciento de los autónomos no prevé despedir a nadie este año y un tercio hizo algún contrato durante 2017.
El presidente de ATA, Lorenzo Amor, ha explicado en rueda de prensa que uno de los grandes problemas en la comunidad sigue siendo la morosidad, pública o privada, que afecta al 42 por ciento y más de un tercio de los autónomos tiene facturas de más de seis meses.
Entre las diez medianas ciudades que peor promedio de pago tienen en España hay cinco andaluzas, por lo que ATA espera que este año haya consenso en el Congreso y se pueda imponer un régimen sancionador que penalice a las empresas o administraciones morosas.
En el caso de la Junta de Andalucía, Amor ha celebrado que tenga "la intención" de solucionar los problemas, pero ha reclamado que se pase "a la acción" con ayudas directas, una de ellas la ampliación de la tarifa plana a 24 meses como en la Comunidad de Madrid.
En cuanto a las principales reclamaciones, los autónomos piden una bajada de los impuestos, especialmente del IVA, y la regulación de las cotizaciones sociales para rebajar la cuota mensual.
Estos dos asuntos, junto a la competencia desleal como consecuencia de la economía sumergida y las trabas burocráticas son los problemas más reseñados por los encuestados.
En el hipotético caso de una bajada de impuestos, la mayoría se decanta por el IVA (42,1 por ciento), las cotizaciones sociales (30,4 por ciento) o el IRPF (25,9 por ciento).
El 66 por ciento de los autónomos societarios andaluces aumentaría su base de cotización si la cuota que paga a la Seguridad Social fuera un gasto deducible para la empresa, y un 60 por ciento no está a favor de asimilar cotizaciones a ingresos reales.
En ese sentido, Amor ha subrayado que hay un 20 por ciento de autónomos que vive "un auténtico calvario" porque facturan menos que la base de cotización.
Los autónomos andaluces piden cada vez menos financiación, ya que solo uno de cada tres la solicitó el año pasado y al 72,3 por ciento se les concedió.
Amor ha destacado que en 2017 Andalucía ha sido la segunda comunidad en términos absolutos de crecimiento de autónomos y la cuarta en porcentajes, y ha garantizado que si se hubiera ampliado la tarifa plana los resultados hubieran sido mejores.
El barómetro, realizado a nivel nacional entre el 19 de diciembre y el 8 de enero, ha incluido 3.000 encuestas válidas, 600 de ellas de autónomos andaluces.
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