La Mesa del Parlamento andaluz ha acordado la concesión de más de 10,5 millones de euros para subvenciones a los grupos parlamentarios para el presente año 2018 en concepto de gastos de funcionamiento y personal, según han informado a Europa Press fuentes de la Cámara.
En concreto, el acuerdo de la Mesa de la Diputación Permanente, firmado el pasado 17 de enero, fija en 10.582,241,8 euros las subvenciones para los grupos, 9.526.326,25 euros para gastos de funcionamiento y 1.055.915,6 euros para gastos de personal.
En relación a los gastos de funcionamiento y en función a los diputados de cada grupo, el Socialista recibirá 3.790.756,20 euros; el Popular, 2.661.594,84 euros; Podemos Andalucía, 1.431.732,24 euros; Ciudadanos, 928.288,09 euros e IULV-CA, 713.954,88 euros.
En lo que se refiere a las subvenciones para los gastos de personal, el Grupo Socialista y el Popular obtendrán 245.760,16 euros cada uno, mientras que Podemos, Ciudadanos e IULV-CA recibirán 188.131,76 euros para cada grupo.
El citado acuerdo consta de una disposición final que recoge que el letrado mayor de la Cámara está facultado para realizar cuantas actualizaciones sean necesarias en la ejecución y el desarrollo del presente acuerdo.
La subvención general para gastos de funcionamiento que se asigna en el Parlamento andaluz a cada grupo distingue entre una subvención fija idéntica para todos los grupos (29.588,85 euros mensuales desde 2008), y otra variable en función del número de diputados de cada uno de ellos, corregida en el caso de los dos grupos mayoritarios con la finalidad de que la subvención final resultante por diputado para ambos sea idéntica.
La Mesa del Parlamento establece, en relación con estas subvenciones que tendrán el carácter de nominativas, y adoptará acuerdos específicos de fijación de las cuantías correspondientes a cada grupo parlamentario, "lógico en una concepción del presupuesto como la existente en nuestro derecho, donde los créditos presupuestarios que se incluyen en la correspondiente ley anual se configuran como "meras autorizaciones para gastar", desprovistos de obligatoriedad en cuanto a su ejecución.
