Ayesa Advanced Technologies (Ayesa AT, la antigua empresa pública Sadiel que desde 2011 controla el grupo de ingeniería sevillano Ayesa y por la Junta en un 78 y 22% respectivamente) ha sido requerida por la Inspección de Trabajo a regularizar la situación de 158 trabajadores que encadenaban contratos temporales desde hace incluso nueve años, en los casos más extremos. El requerimiento tiene fecha de junio pasado, y en él el inspector da tres meses a la empresa para regularizará la situación, según informó el sindicato CSC, que ha controlado el comité de empresa de Ayesa AT hasta el mes pasado (y mantiene 10 delegados), cuando UGT se hizo con el control de ese comité tras las elecciones sindicales.
Según el requerimiento de la inspección, cuando el inspector Fermín Yébenes se presentó en las oficinas centrales de la empresa en Torre Sevilla el pasado 25 de mayo tras la denuncia presentada previamente por CSC, se entrevistó con los responsables de recursos humanos Marta Aguiar y Ramón Gil. “Se les requiere que informen al inspector acerca del listado de trabajadores temporales que pueden reunir las condiciones de ser considerados como fijos atendiendo a lo establecido en el artículo 15.1 del Estatuto de los Trabajadores”.
“Insuficiente”
Y prosigue el documento del inspector: “Reconocen los interlocutores que hay trabajadores temporales en esta situación y que la empresa ha procedido en los meses de marzo, abril y mayo a su conversión en indefinidos a 24 de después, el 7 de junio, la previsión de convertir otros 20 empleos a indefinidos. Esto se considera “insuficiente” por el inspector, que da tres meses a la empresa para cumplir la ley en su requerimiento de junio. Y advierte de que Ayesa AT debe informar a la inspección de la conversión a fijos de los empleados afectados -158 en total, según CSC- y de que, pasados los tres meses, y si no ha cumplido la ley, abrirá expedientes infractores de hasta 6.250 euros por cada contrato en fraude de ley.
CSC aseguró ayer en una nota que sólo se ha actuado en 80 casos hasta la fecha, la mitad. Este sindicato volvió a denunciar esta situación en septiembre “debido a la pasividad de la empresa y a la escasa vigilancia que lleva a cabo la Inspección para su cumplimiento”. Ayesa tiene 1.300 empleados distribuidos en Sevilla, Madrid y Barcelona, sobre todo.
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