Cajasol ha obtenido durante el primer semestre del ejercicio un resultado consolidado recurrente atribuido al grupo de 100,4 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 3,7 por ciento en comparación con los primeros seis meses del año pasado.
La entidad ha logrado disminuir más de un punto la morosidad objetiva, situando esta tasa en el 3,8 por ciento, una ratio muy positiva en comparación con la evolución del resto del sector, según un comunicado de Cajasol.
En cuanto a la eficiencia, el comunicado destaca "la importante labor realizada desde principios de año, con una reducción en los gastos generales de más del 18 por ciento, lo que supone un ahorro de 15 millones de euros en estos primeros seis meses, con una previsión de ahorro de 25 millones a final del ejercicio".
El resultado consolidado atribuido al grupo de la entidad en este primer periodo alcanzó los 69 millones de euros, lo que refleja una disminución del 37 por ciento en comparación con el mismo periodo de 2008, en línea con la tendencia de decrecimiento en el primer trimestre de este año.
En este periodo, Cajasol ha obtenido un aumento en el margen de intereses del 3,1%, lo que en cifras absolutas representa un incremento de 10 millones de euros, cerrando en los 336 millones de euros.
En cuanto al crédito a la clientela, se redujo en un 4,3 por ciento, alcanzando un volumen total de 22.341 millones de euros.
La posición de liquidez de Cajasol se encuentra actualmente "muy por encima de la media, gracias entre otras cuestiones a una buena política de captación de recursos gestionados, y a la destacada emisión reciente de deuda avalada por el Estado por importe de 1.000 millones de euros, más 200 millones de euros adicionales de emisión de cédulas hipotecarias", según la caja con sede en Sevilla.
Por otro lado, la Asamblea General Extraordinaria de Cajasol ratificó el nombramiento de Juan Salido Freyre como nuevo director general de la Entidad en sustitución de Rafael López-Tarruella.