La Policía Local de Cádiz detuvo el pasado domingo un hombre de 39 años de edad por un presunto delito contra la seguridad del tráfico y desobediencia a agentes de la autoridad, tras ser sorprendido conduciendo un todoterreno por la playa de la Victoria con las luces apagadas y dando resultado positivo en la prueba de alcoholemia.
En un comunicado, el Ayuntamiento explicó que los hechos tuvieron lugar en la madrugada del pasado domingo, cuando una dotación policial comprobó que un vehículo circulaba a "alta velocidad" y con las luces apagadas por la arena en la playa Victoria.
Los agentes bajaron a la playa y se dirigieron al vehículo. El conductor se percató de la presencia policial reanudando su marcha a gran velocidad y nuevamente con las luces apagadas. Finalmente fue localizado cuando salía de la playa por la rampa sur de la playa de Santa María del Mar, aunque los agentes tuvieron que bloquearle el paso con el vehículos policial ya que el conductor desoyó el requerimiento de que parase.
Una vez detenido el vehículo, los agentes se dirigieron a su conductor solicitándole en voz alta hasta en tres ocasiones que parase el motor y se apease del vehículo, haciendo caso omiso, y observando como ponía su mano derecha sobre la palanca de cambio con intención de reanudar de nuevo la marcha del vehículo.
Por ello, los agentes se vieron en la necesidad de obligarlo a que se apease, percibiendo como el citado presenta síntomas claros de encontrarse bajo la influencia de bebidas alcohólicas. De hecho, una vez realizada la prueba de alcoholemia, arrojó un resultado positivo de 1,00 miligramos por litro. El conductor fue citado para juicio rápido ante la autoridad judicial.
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