El presidente nacional del Partido Popular, Mariano Rajoy, acudió a un encuentro con afiliados en la localidad gaditana de Chipiona, acompañado por el presidente regional del PP, Javier Arenas y de su homólogo provincial, José Loaiza, así como por otros dirigentes populares de la provincia de Cádiz.

El acto, que tuvo lugar en un céntrico hotel del municipio costero, se convirtió en un baño de multitudes para Rajoy, que fue recibido por simpatizantes del PP a gritos de “presidente”. No en vano, las primeras palabras del líder del PP fue para agradecer a los afiliados chipioneros y a los responsables locales de este partido los buenos resultados obtenidos en las pasadas elecciones europeas. Al hilo, Rajoy aprovechó para animar a los presentes a “ir calentando motores” de cara a la celebración de las próximas elecciones municipales, para las que restan menos de dos años. Así, apeló a los afiliados para solicitarles que se conviertan “en periodistas para transmitir a los ciudadanos el mensaje del Partido Popular”.

PROPUESTAS

Centrándose en la actualidad política nacional, el dirigente popular centró sus críticas tanto en los dirigentes andaluces como en el propio presidente del Gobierno de la Nación, José Luis Rodríguez Zapatero, a quien acusó de “esperar a que escampe” y de “gastar lo que no está en los escritos, elevando el déficit público” en alusión a las políticas puestas en marcha por los socialistas para salir de la crisis económica. Al respecto, Rajoy afirmó que “saldremos de la crisis y en España se va a crear empleo, pero para eso necesitamos otra política económica y otro Gobierno, porque Zapatero lo que hace es retrasar la recuperación”.

En cuanto a la financiación autonómica, el presidente nacional del principal partido de la oposición aseguró que “han hecho un churro” y pidió que la vicepresidenta económica explique “cuánto recibe cada una” de las comunidades autónomas. También hizo alusión Mariano Rajoy a la consecuencia de este modelo de financiación sobre la financiación local, sumándose a la petición de dimisión del presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) por haber “consentido aplazar la reunión para abordar la financiación local hasta 2001”, que previamente a su intervención en este acto había realizado la alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, quien argumentó que “los ayuntamientos destinan el 16 por ciento de sus recursos a financiar competencias de las comunidades autónomas o del Estado”.

Rajoy también acusó a Zapatero de querer hacerse “desesperadamente una foto con los agentes económicos y sociales” y aseguró que “España no necesita una foto de Zapatero sino un Gobierno que tome decisiones y que se hagan cosas para terminar con las tasas del desempleo”. “El paro es la principal preocupación del Partido Popular”, reseñó.

El líder de los populares aprovechó su desplazamiento a una localidad eminentemente turística como Chipiona para posicionarse a favor de los chiringuitos. “Yo y el PP estamos a favor de los chiringuitos porque están en la historia y la cultura no sólo de Andalucía sino de todo el país y porque son creadores de empleo y riqueza”, manifestó, al tiempo que anunciaba la propuesta que el PP pretende llevar al Congreso y que, “vamos a ganar” para que se otorguen las concesiones o renovaciones de las mismas a las personas que son titulares de los chiringuitos y para que se favorezca la adaptación a los requisitos medioambientales que exige la ley.
Abordando temas de candente actualidad, Rajoy ofreció detalles sobre la propuesta de reforma de la Ley del Menor en la que ya están trabajando los populares para llevar en septiembre al Congreso de los Diputados. La reforma del sistema educativo como medida de prevención y modificar la parte penal para que “se agraven las penas de los mayores que cometan un delito acompañados de menores y se rebaje la edad penal en los casos especialmente graves y en los reincidentes” fueron las bases anunciadas por el líder de la oposición en esta materia.

Por último, y en tono de humor, Rajoy dirigió sus críticas sobre el ministro de Exteriores sobre el que dijo, “ha sido el primer ministro de Exteriores de la humanidad que ha realizado una visita oficial a su propio país”. En la misma línea declaró que “España es un gran país y su política exterior no puede estar en manos de gente que hace el ridículo como Moratinos”.

Durante su visita a Chipiona, en la que aprovechó para visitar el santuario de Nuestra Señora de Regla, el presidente nacional del Partido Popular eludió contestar a las preguntas de los diversos medios de comunicación que habían acudido a la convocatoria pública.