Los expertos vinculan el fin de la crisis en Andalucía a la reforma educativa y laboral

El cambio de modelo educativo, la urgente reforma del mercado laboral, un mayor apoyo a los emprendedores y la apuesta por la innovación, son algunas de las actuaciones que deben tomarse para que Andalucía pueda salir de la crisis económica, según un libro editado por el BBVA y la Universidad Pablo de Olavide.

El trabajo, que fue presentado ayer en Málaga, señala que la economía andaluza se encuentra inmersa en una situación coyuntural, cuya dificultad está alcanzando rápidamente "los límites de la última gran crisis económica vivida a principio de los años 90".

Andalucía "no puede continuar" con los modelos actuales de educación, de mercado de trabajo y de investigación, ya que su consecuencia ha sido "una pérdida relativa del nivel de productividad, de eficiencia y competitividad de las empresas andaluzas", sostiene.

Para "cambiar el rumbo", es preciso encarar reformas para "modificar este comportamiento tan débil de la productividad evidenciado en los últimos lustros", las cuales deben afrontar el problema con un espíritu a largo plazo, indica el libro.

Tras recordar que Andalucía figura en la última posición de las regiones españolas encuestadas para el informe PISA (OCDE, 2006), lo que se une a la elevada tasa de fracaso y abandono escolar, insiste en que la educación es "la mejor inversión" para mejorar los niveles de eficiencia y, por tanto, de bienestar de una economía, y apuesta por mejorar la Formación Profesional.

En cuanto a las reformas en el mercado de trabajo, los expertos ven necesario "difuminar" la dualidad entre trabajadores fijos y temporales, con derechos y protecciones "muy diferentes" mediante la introducción de un único contrato para las nuevas contrataciones.

Argumenta que la excesiva temporalidad reduce la fidelidad del trabajador respecto a al empresa y provoca menor productividad.

El libro indica sobre las administraciones públicas que constituyen "un dique" para multitud de proyectos empresariales, y que España y Andalucía están a la cabeza en Europa en cuanto a días necesarios y trámites para constituir una empresa.

A su vez, plantea que debería "reconsiderarse la carrera funcionarial como reforma de choque para elevar la eficiencia de la administración".

También propone que el emprendedor sea "mimado y ayudado", pues es "el verdadero dinamizador de la economía".

El trabajo, que constituye un primer volumen de la serie "El campo de las artes y las ciencias en Andalucía", destaca asimismo que la innovación debe ser un "factor clave" para el desarrollo de las empresas andaluzas independientemente del sector productivo.

La región se enfrenta al reto de construir su futuro económico "aceptando que la mayor parte de los vínculos con su pasado reciente tienen que ser abandonados", perspectiva en la que incluye al turismo como una de las actividades de atención preferente por parte de los estímulos fiscales.

A este respecto, refiere que si el proceso de recuperación se anticipa en países como Alemania o Reino Unido -los dos principales emisores de turismo extranjero hacia Andalucía-, cabría pensar en aprovechar el impulso de estas economías.

Sobre el sector financiero, apunta que es necesaria una reestructuración y señala que será más rápida cuanto mejor y más pronto se adapten las instituciones financieras a la mayor regulación que probablemente se avecina.