El secretario de Estado de Presupuestos y Gastos, Alberto Nadal, ha cifrado este miércoles en unos 1.000 millones de euros el coste de la nueva Ley de Medidas Urgentes al Trabajo Autónomo, de los que entre 500 y 600 millones se corresponderán a la ampliación de la tarifa plana, y ha afirmado que la "única restricción" para acometer rebajas impositivas es que sean compatibles con el objetivo de consolidación fiscal.
Así lo ha señalado durante su intervención en la jornada sobre los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2017, organizada por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD) y Deloitte, en la que ha augurado un impulso "muy importante" de la nueva ley de autónomos a las pequeñas y medianas empresas, al conllevar una reducción de cotizaciones y de la imposición.
La mayor parte de las medidas incluidas en la nueva Ley de Autónomos entrarán en vigor después del verano, mientras que el resto se pospondrán hasta el 1 de enero de 2018, y entre sus medidas se incluye la que que dobla el periodo de vigencia de la tarifa plana de 50 euros, pasando de seis meses a un año, de la que más de 350.000 autónomos ya existentes se beneficiarán.
Nadal ha explicado en declaraciones a los periodistas que "las cosas van mejor", ya que la economía entra en su tercer año de crecimiento y empieza a haber "márgenes", como el referido a la Ley de Autónomos, ya que la recaudación tributaria "va bien" y permite "cumplir el objetivo de déficit y tener algunos márgenes para el año que viene".
No obstante, ha advertido de que España todavía está "a mitad de camino" de la recuperación, ya que persiste un déficit superior al 3%, por lo que ha marcado la necesidad de utilizar "sabiamente" los recursos adicionales que se registren con una combinación de reducción del déficit y atención a los gastos más importantes".
BAJADA DE IMPUESTOS
En este sentido, Nadal ha indicado que Hacienda está negociando con otros grupos políticos cómo ir "encajando" las rebajas impositivas en los próximos ejercicios, como la referida a la disminución del IRPF demandada por Ciudadanos, sobre lo que ha apuntado que la "única restricción" para poder bajar los tributos es que sea "compatible" con el objetivo de consolidación fiscal (reducción del déficit y la deuda) para que las cuentas sean "sanas" y "no vulnerables ni un factor de desequilibrio" como en el pasado.
A este respecto, ha rechazado las subidas impositivas "masivas" propuestas por algunos grupos, de 20.000 millones en un caso y de 9.000 millones en otro, ya que "cuando está la recuperación tierna, a mitad de camino, subir masivamente los impuestos no es la respuesta para el crecimiento y la creación de empleo, ni dar marcha atrás en las reformas".
En todo caso, Nadal ha indicado que el pasado mes de marzo la "crítica" al Gobierno se refería a que los ingresos estaban "hinchados", si bien la recaudación impositiva va a estar "muy cerca" de la previsión, por lo que el debate ahora es en qué se va a gastar la recaudación adicional.
"Quizá antes de tiempo, solo cuando estemos ante la consolidación fiscal, podremos hacer alegrías", ha apuntado Nadal, quien a la salida del acto ha insistido en que los "pequeños márgenes" que haya tienen que ser destinados "prioritariamente a aquellos a los que no les ha llegado la recuperación".
Conforme lo vaya permitiendo la reducción del déficit, ha asegurado que el Gobierno estudia rebajas fiscales dirigidas a las áreas "con mayor capacidad de relanzar la economía".
A su juicio, hay que reducir y "eliminar" el déficit, porque "nadie puede pedir permanentemente ni la Administración puede estar en situación de déficit", aunque cree que no hay que eliminarlo "de golpe", por que hay servicios públicos que son "irrenunciables".
"Las reducciones de déficit público tienen que ir acompasadas al ritmo de la economía", ha señalado, indicando que el déficit bajará al 2,2% en 2018, se situará ligeramente por encima del 1% en 2019, para alcanzar el equilibrio ya en 2020.
EL SALARIO DE LOS FUNCIONARIOS SUBIRÁ "UN POCO"
En esta línea, Nadal ha indicado que el salario de los empleados públicos se subirá "un poco" el próximo año, cuando están a punto de comenzar las negociaciones con los sindicatos para acordar el incremento para el año que viene.
Tanto la secretaria de Estado de Función Pública, Elena Collado, como el propio ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, han expresado en varias ocasiones su intención de alcanzar un acuerdo y que la subida pudiese ser superior a la aprobada para este año, del 1%. En cualquier caso, Nadal ha indicado que la cifra de incremento "no será" la que plantean los sindicatos.
CRECIMIENTO "AUTOSOSTENIDO"
El secretario de Estado de Presupuestos se ha referido durante su intervención a los peores momentos de la economía española durante la crisis, cuando "el enfermo se nos iba", y se tomaron decisiones difíciles, que en la mayor parte fueron "acertadas", aunque "no todo fue perfecto".
Según Nadal, en los próximos tres años "todo el mundo" espera que España siga registrando crecimiento y creación de empleo y ha explicado que la economía este año está creciendo no solo por la política monetaria ni por la bajada de precios de la energía, sino porque "hemos conseguido ya colocar a la economía española en un crecimiento autosostenido que todos los analistas esperan que continúe", ha explicado.
Sin embargo, ha insistido en la importancia de reducir el déficit público y la deuda, que para 2020 se situará en el entorno del 92% o 93% del PIB, por lo que ha advertido de que en el medio plazo cambia la política de tipo de interés y si persiste un nivel alto de deuda pública conllevará un coste "muy elevado".
Por ello, ha abogado por remarcar a inversores nacionales e internacionales y compradores de deuda que la deuda pública está descendiendo, y que hay que aprovechar el crecimiento para desapalancar y reducir el endeudamiento. De hecho, ha indicado que se está "preparando" la economía para ese cambio con el fin de que el impacto del cambio de la política monetaria sea "incluso nulo".
REDUCIR CUÑA FISCAL Y "TOCAR" IMPUESTOS DE I+D
Además, ha subrayado que hay que preparar las cuentas públicas para una población que no deja de envejecer y trabajar por resolver el desempleo estructural, que refleja unos grupos de población con "fuertes dificultades" para su empleabilidad, por lo que ha abogado por reducir la cuña fiscal, la diferencia entre el salario bruto y neto (lo que el trabajador tiene que pagar y percibe), así como mejorar el sistema educativo y profesional.
También ha indicado que si se "tocan" figuras tributarias para que las empresas puedan asumir el coste de I+D+i se puede conseguir un "gran impulso", pero sin comprometer el objetivo de política presupuestaria, aunque sí implicando un "esfuerzo adicional" en los PGE.