Una década después de que la ya extinta SOS Cuétara, dueña de Carbonell y Koipe, comprara las marcas italiana de aceite de oliva líderes en EEUU -Carapelli, Bertolli y Sasso- y creara con sede en España a Deoleo,
el líder mundial del zumo de aceituna, el grupo ha pasado a estar dirigido por un directivo italiano. Todo ello después de que hoy lunes, en la junta de Deoleo convocada para reducir su capital social en 323 millones para compensar pérdidas acumuladas, se produjera la inesperada dimisión de la presidenta Rosalía Portela.
Ocupaba el cargo desde
septiembre pasado solamente y ha sido sustituida por el consejero delegado Pierluigi Tosato. El capital social de la empresa se sitúa tras esta reducción en 115 millones.
“Una vez terminada esta etapa de reestructuración y redefinición de la estructura operativa de la compañía, he anunciado en el consejo de administración mi intención de abandonar el cargo de presidenta”, anunció en la junta.
Una vez aprobada la reducción de capital ha finalizado la última fase de la reestructuración de la compañía, cuya sede social está en Alcolea (Córdoba).
Portela destacó que las medidas operativas y de transformación implantadas sitúan a la compañía en una “mejor situación” para avanzar en el desarrollo del negocio, centrándose en las iniciativas comerciales, de innovación y en sus "prestigiosas" marcas para abordar con éxito nuevos mercados y alcanzar unos niveles de rentabilidad adecuados a la ambición de la empresa. “Nuestra estrategia comercial de diferenciación a través de la calidad será una de nuestras prioridades ofreciendo en todo el mundo marcas de prestigio y productos de calidad con garantías y trazabilidad”, resumió.
Deoleo sufrió el pasado año graves problemas de calidad en algunas partidas de aceite enviadas a EEUU.
La empresa propiedad hoy del fondo de capital riesgo británico CVC, y en la que también participa Unicaja con un 10%, ha perdido 7,5 millones en el primer trimestre de este año.
Suma números rojos de 314 millones entre 2014 (74 millones), 2015 (61) y 2016 (179 millones). En marzo pactó un ERE para 65 empleados (46 en Alcolea) y vendió en 2016 su planta de Antequera a la cooperativa andaluza Dcoop.