Provincia de Granada

"Desapareció" de la parroquia tras notar "excesivo cariño" de Román

Un joven ha declarado en la cuarta sesión del juicio que se está celebrando esta semana en la Audiencia Provincial de Granada en el 'caso Romanones'

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  • El padre Román. -

Un joven que fue monaguillo en la parroquia de San Juan María Vianney del barrio granadino del Zaidín ha declarado este jueves ante el tribunal que "desapareció de allí" tras experimentar situaciones de "excesivo contacto físico" y "cariño" por parte del padre Román M.V.C., como "besos en el cuello", "caricias en el muslo debajo del brasero" y proposiciones de masajes, aunque nunca sufrió abusos sexuales.

Este joven ha declarado como testigo en la cuarta sesión del juicio que se está celebrando esta semana en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Granada contra el padre Román, que está acusado de abusar sexualmente de un menor de su parroquia desde 2004 a 2007 y que se enfrenta a una petición fiscal de nueve años de cárcel por esta causa.

Este testigo, que es amigo del denunciante de los abusos desde que eran pequeños y ha compartido con él actividades en la parroquia del barrio, ha relatado que en este entorno religioso se producían situaciones que "no eran muy cómodas" y ha centrado su declaración en un episodio que le "impactó" especialmente y que se produjo durante una convivencia en la vivienda que el grupo de sacerdotes de los Romanones tenía en Los Pinillos (Granada).

Allí, según su relato, el padre Román le dijo al caer la noche que tenía que dormir en la misma cama con él. "Me negué en rotundo", ha señalado, precisando que tras colocar un colchón en el suelo para que se acostara, el sacerdote le pidió que le hiciera un masaje que también se negó a realizar, a pesar de la "insistencia" del párroco, que según mantiene se encontraba "en calzoncillos" durante toda la conversación.

"Al día siguiente me fui y desaparecí de allí (...) Me impactó mucho y decidí guardarlo en mi interior, no se lo conté a nadie, ni a mis padres", hasta que se "desahogó" años más tarde con su amigo y denunciante cuando éste le contó que habría sufrido abusos. Esta jornada del juicio se está viendo marcada por la ausencia inesperada de otro joven que debía declarar como testigo y que inicialmente también denunció haber sufrido abusos.

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