De Cádiz a Madrid, pasando por Burgos o Barcelona entre otras ciudades, el Sorteo Extraordinario de Navidad ha viajado repartiendo alegrías a lo largo de sus 204 años de historia, si bien no fue bautizado con ese nombre hasta finales del siglo XIX.
Durante la Guerra de Independencia española, en noviembre de 1811, el ministro del Consejo de Indias, Ciriaco González Carvajal, planteó la idea de la "Lotería Moderna", con la "Lotería Primitiva" instaurada por el Marqués de Esquilache en 1763 como antecedente y el objetivo de sufragar el gasto de las batallas.
Para Ciriaco, cuya propuesta pronto tuvo una acogida muy favorable, este sorteo era "un medio de aumentar los ingresos del erario público sin quebranto de los contribuyentes".
Así, tuvo lugar en Cádiz el primer sorteo de esta nueva Lotería el 4 de marzo de 1812, que en sus primeros años se realizó en Andalucía y Ceuta.
Años más tarde, con la expulsión de los ejércitos napoleónicos, el sorteo se trasladó a Madrid.
El 18 de diciembre de 1812 se celebró la primera Lotería de Navidad en la capital gaditana, que dotó al afortunado que tenía el número 03.604 con 8.000 pesos fuertes por un billete que le costó 40 reales.
Al año siguiente, las cédulas de papel que se utilizaban fueron sustituidas por bolas de madera para representar números y premios, y no fue hasta 1853 cuando aparecieron los primeros bombos metálicos.
Sin embargo, esta Lotería Nacional realizada en diciembre no se conoció popularmente con el sobrenombre de "Sorteo de Navidad" hasta 1892, cuando aparece en el programa de premios. Y no fue incluida dicha terminología en el décimo hasta 1897.
En 1938, durante la Guerra Civil, con una España dividida, el sorteo se celebró en dos ciudades distintas: Barcelona, después de haber pasado por Valencia el año anterior, fue la urbe elegida en el bando republicano y Burgos la del bando sublevado.
Tres años después se introdujeron los reintegros, una medida exitosa que supuso un gran aumento en las ventas de un sorteo que terminaría por popularizarse totalmente en 1957, cuando se televisó por vez primera.
Durante más de cuarenta años, el salón de sorteos de la calle Guzmán el Bueno de Madrid albergó la Lotería de Navidad, viviendo la transición de la peseta al euro en 2002, hasta que ese espacio se quedó pequeño y tuvo que ser trasladada al Palacio de Congresos hace ahora seis años.
El próximo día 22 de diciembre, fecha que viene siendo tradición, niños y niñas de la residencia-internado de San Ildefonso cantarán los premios del Sorteo Extraordinario de la Lotería de Navidad desde el Teatro Real de Madrid, como ocurre desde 2012.
Y como cada año, con el sueño de ser quienes canten el "Gordo", máximo premio que reparte 400.000 euros al décimo agraciado.
