Mauricio González-Gordon, presidente González Byass, ha protagonizado una nueva sesión de los desayunos/coloquios del Club de Directivos Andalucía, celebrado en la sede del Instituto de Estudios Cajasol. El directivo que gestiona la bodega jerezana que produce y envasa Tío Pepe o el tinto Beronia lanzó varias ideas relevantes durante el coloquio posterior a su ponencia.
La más llamativa de todas ellas, en relación con una pregunta sobre cómo ha afectado al sector del vino de Jerez la estrategia y posterior quiebra de las bodegas del grupo Nueva Rumasa de el jerezano José María Ruiz-Mateos, fue esta: “Ha tenido gran influencia en el sector con prácticas poco ortodoxas. Esto no ha ayudado a aportar un gran valor al sector de Jerez, todo lo contrario”.
Tras repasar la trayectoria de su grupo empresarial, y con respecto al revuelo del sistema de envasado de bajo coste Bag in Box en Jerez, González-Gordon aseguró que no entiende esta situación como una batalla entre Sanlúcar y Jerez. “Lo primordial es cumplir con la norma establecida para envasar todo tipo de vinos”.
La presentación del acto corrió a cargo de Antonio Pulido, presidente de la Fundación Cajasol y del Instituto de Estudios, que ha aprovechado su intervención para felicitar a González Byass por su gran gestión empresarial que se ha transmitido de generación en generación durante casi 200 años de exitosa trayectoria. También ha agradecido la asistencia a Mauricio González-Gordon ya que figura como “persona conocedora y comprometida con el Marco de Jerez, consciente de la posición que ocupan los productos en los mercados mundiales y los retos a los que se enfrentan”.
Reinvención
Ante los más de 120 empresarios y directivos asistentes, el Presidente de González Byass, Mauricio González-Gordon, ha repasado la historia de González Byass y ha definido a su empresa en dos líneas: “Somos elaboradores de vino, despertamos cierta inquietud por estar en constante innovación, comercializamos nuestros productos y somos constructores de una marca bien afianzada”.
"Vistos los cambios que ha experimentado el sector del vino, la ampliación de su origen, el descenso en el consumo de este producto en España y el aumento de consumo en países no productores, González Byass ha tenido que reinventarse en múltiples ocasiones para adaptarse a las diversidades y colocarse como una de las marcas de vino referentes”, ha señalado.
Por otro lado, González-Gordon ha hecho hincapié en la importancia que ha dado su empresa a construir una marca fuerte y asentada. “Pretendemos dar independencia a las bodegas sin que exista la presencia de González Byass como marca paraguas para dar valor al producto. El único caso en el que sí queremos que aparezca nuestra marca es en aquellos productos en el que el distribuidor es el destinatario”.
“Casi 200.000 personas visitan nuestras bodegas y servimos aperitivos a 50.000 personas. Es cierto que no es una actividad principal pero sí nos genera rentabilidad y posicionamiento”, ha afirmado.