Estudió Educación Física y viendo el desalentador futuro que le ofrecía Rumanía, pagó un viaje en una caravana ilegal y llegó a Balerma
Nació en Rumanía donde despuntó desde niña en el atletismo. Desde los 11 años hasta los 25 Emilia Paunica vivió en un Centro de Alto Rendimiento, destacando como una de las diez mejores atletas de su país. Estudió Educación Física y viendo el desalentador futuro que le ofrecía Rumanía, pagó un viaje en una caravana ilegal y llegó a Balerma, en el término municipal de El Ejido, Almería.
Trabajó cogiendo tomates y descargando sandías para poder ir a entrenar por las tardes y cumplir su sueño. Años de duro esfuerzo que le llevaron a vivir en cortijos abandonados e incluso en un convento a cambio de dar clases.
Con el permiso de residencia pudo inscribirse en la Federación Española de Atletismo y desde entonces su carrera en absoluto y máster ha sido meteórica: cuenta con varios subcampeonatos del mundo y ha sido en diferentes ocasiones campeona de Europa y de España. El entrenador que más le ha marcado ha sido el mítico Emilio Campra, al que dedica cada una de sus hazañas.